Si te encuentras distraído, perdiendo un tiempo precioso e incapaz de concentrarte en tus tareas, es probable que no estés siendo tan productivo en el trabajo como te gustaría. Ya sea que se trate de distracciones comunes que se encuentran en la oficina o en el lugar de trabajo en el hogar, o incluso distracciones mentales y pensamientos intrusivos que te impiden hacer tu mejor trabajo, es fácil perder de vista la tarea que tienes entre manos cuando siempre estás luchando contra un estímulo u otro.
Cuando te sientes así, puede ser útil tener uno o dos trucos bajo la manga para ayudarte a volver a la normalidad. A continuación, compartimos algunos trucos para encontrar y mantener tu enfoque en el lugar de trabajo.
Trucos para encontrar y mantener tu enfoque en el lugar de trabajo
- Haz un ejercicio de atención plena. Toma un descanso y haz una meditación rápida o un ejercicio de atención plena. Esto funciona bien porque te permite despejar tu mente y volver a concentrarte en la tarea que tienes entre manos. Al tomarte unos minutos para concentrarte en tu respiración y conectarte con el momento presente, puedes dejar de lado las distracciones y volver al trabajo con energía y enfoque renovados. Esta técnica te ayuda a relajarte, reducir el estrés y mejorar tu concentración y productividad.
- Trabaja con personas productivas. El enfoque es contagioso, por lo que trabajar junto a tus colegas productivos y enfocados siempre es efectivo para hacer que te vuelvas a encaminar y te olvides de las distracciones. Esto crea menos posibilidades de ser interrumpido. Si tus colegas no están enfocados y te siguen interrumpiendo, establece límites. Crea un entorno productivo a tu alrededor para mantenerte a ti mismo y al equipo eficientes.
- Date una recompensa que esperar. Una forma de mantenerte motivado en el trabajo es recompensarte con algo que disfrutes todos los días. Esto podría ser un pequeño obsequio, como tu dulce o café favorito, o algo más grande, como salir a comer. Lo importante es encontrar algo que realmente te guste y que te haga sentir enérgico. Sea lo que sea que disfrutes, asegúrate de programarlo en tu día para que tengas algo que esperar. Esto te ayudará a mantenerte enfocado y motivado, incluso en los días en que el trabajo sea desafiante. Además, es una forma de demostrarte que eres capaz de cumplir tus objetivos. Cuando te sientes bien con lo que has logrado, es más probable que sigas motivado en el futuro.
- Completa tu “Rutina de reinicio”. Cuando no funciones al máximo rendimiento, para y restablece tus niveles de energía y mentalidad, lo que puede denominarse como «rutina de reinicio». Una rutina de reinicio es una actividad que te recarga las pilas. Ten una lista de actividades que encajen en esta categoría y que puedas escoger y elegir según tu estado actual. La lista puede incluir actividades como salir a correr, cortarte el pelo, comprar ropa, etc. Tomar este descanso puede darte una perspectiva diferente, desencadenando soluciones e ideas.
- Haz algo de actividad física. Puede ser un paseo por el barrio o el parque empresarial. La actividad te permite romper la postura tanto mental como físicamente que te ha llevado a distraerte mientras estás lo suficientemente relajado como para permitir algún tipo de meditación. Si estás viendo signos fisiológicos de una disminución en la eficiencia, es probable que no hayas sido efectivo durante bastante tiempo. Al crear una separación tanto física como mental de las tareas en cuestión, puedes recargarte de manera efectiva y volver más eficiente que antes.
- Toma una siesta corta. Cuando estás distraído, estás perdiendo el tiempo de todos modos, así que ¿por qué no utilizarlo para algo que te refresque? Los seres humanos somos muy susceptibles a las distracciones. Entonces, es normal que perdamos el foco cuando trabajamos. Lo que empeora las cosas es que cuando intentas recuperar ese enfoque, te resultará más difícil en comparación con canalizarlo la primera vez. Así que, sea cual sea la razón por la que perdiste la concentración, da un paso atrás toma una pequeña siesta para recarga tu energía. Será mucho más fácil para ti recuperar tu ritmo con una mente fresca.
- Piensa dónde y quién quieres ser. La distracción te puede pasar como a cualquier otra persona. Entonces, deja de inmediato lo que estés haciendo porque, sin una atención total, no se puede generar calidad. Sal de tu estación de trabajo, prepara una taza de café y piensa en dónde quieres verte en los próximos dos años. ¿Como puedes llegar allí? ¿Cómo puedes llevar tu negocio al siguiente nivel en este tiempo? Este simple truco puede motivarte desde dentro e inspirarte a volver a sentarte frente a tu ordenador. No hay manera de deshacerte de las distracciones. Tienes que entenderlas y la psicología detrás de cómo regresas de ellas.
- Cambia a una tarea más agradable. Cada vez que te encuentres distraído e incapaz de concentrarte, revisa tu lista de tareas pendientes y mira si tienes una tarea en la que es un poco más divertido trabajar. Algunas tareas pueden ser aburridas y monótonas, y trabajar en ellas te hace más susceptible a distraerte con lo que te rodea. Si bien todas las tareas en tu lista de tareas pendientes son importantes y existen por una razón, priorizar la que despierta tu interés es una excelente manera de volver al flujo de trabajo.
- Tómate un tiempo libre. Las vacaciones cortas son una excelente manera de reenfocarte y recargar energías. Si te tomas un descanso del trabajo, aunque solo sea por uno o dos días, puedes regresar sintiéndote renovado y listo para abordar tus tareas. Esto funciona muy bien porque te permite dar un paso atrás en tu trabajo y volver con energía renovada.