Cuando inicias un negocio, no solo eliges ser un empresario, sino que también decides asumir los muchos desafíos que conlleva. Debes comprender cuáles son estos desafíos y cómo superarlos si tu inicio va a tener éxito.
La mayoría de las startups fracasan (90% y en un período de 2 a 5 años). Pero no tiene por qué ser así. Con la preparación, la planificación y la tenacidad adecuadas, puedes superar los errores que hacen que la mayoría de las empresas cierren sus puertas.
Razones clave por las que las startups fracasan
- Demasiado enfoque en el producto, no en un equipo fuerte
Debes contar con un equipo sólido antes de lanzar tu producto. El éxito de una startup no se trata solo de tener una idea innovadora, sino también de construir relaciones con personas dispuestas a apoyarte y ayudarte a crecer.
Un equipo sólido te ayudará a lograr tus objetivos brindándote asesoramiento sobre la mejor manera de comercializar tu producto o servicio, indicándote cuándo es necesario realizar cambios y avisándote cuándo las cosas no están funcionando tan bien como deberían.
- Miedo de pedir ayuda
Nadie es una isla. Cuanto antes te des cuenta de eso, mejor te irán tus asuntos comerciales. Esto puede significar pedir ayuda con el trabajo contable y legal, pero también significa pedir dinero. Algunas personas no querrán invertir en tu empresa porque no saben o no creen en lo que estás haciendo, pero hay muchas que sí lo harían.
No tengas miedo de pedir ayuda a las personas que han tenido éxito antes y están dispuestas a compartir sus conocimientos contigo. Todos saben cuánto más fácil se vuelve la vida cuando todos colaboran.
- No saber cómo operar un negocio real
Cuando las personas inician sus propios negocios, a menudo crean un producto o servicio y lo venden sin pensar en el aspecto comercial de las cosas. No saben cómo administrar las finanzas, tratar con empleados o clientes o administrar su reputación. Se dan cuenta demasiado tarde de que no tienen ni idea de cómo administrar su propia empresa, por lo que fracasan a los pocos meses de comenzar.
Esto sucede todo el tiempo porque las personas piensan que pueden construir algo grandioso y comenzar a venderlo de inmediato, y luego todo encajará por sí solo mientras vuelven a hacer lo que estaban haciendo antes. Sin embargo, no es así como funciona; para ganar dinero con tu idea de inicio, debes conocer ambos lados: construir algo grandioso y administrar un negocio real.
- Nombre y marca deficientes
Darle a tu empresa un mal nombre es como echar un ancla antes de zarpar: arrastrará, enganchará y obstaculizará tu viaje. Pero hay algunas reglas que pueden ayudarte a evitar la pérdida de tiempo y el gasto de tener que cambiar el nombre de su empresa más adelante:
- El nombre de tu puesta en marcha debe ser memorable.
- El nombre de tu empresa emergente debe ser fácil de pronunciar.
- El nombre también debe ser fácil de deletrear. Esto te salvará de clientes insatisfechos que tienen problemas para averiguar cómo pedir algo de tu empresa o entrar en tu página web.
- La mejor manera posible de que las personas recuerden lo que hace tu empresa es asegurarse de que tu nombre destaque de alguna manera; por ejemplo, mediante el uso de una combinación inusual de letras o la inclusión de una palabra poco común como parte de tu título.
- Enfoque en las cosas equivocadas
Debes centrarte en tu mercado, clientes, equipo, producto y cultura empresarial. Todo esto es importante. Si fallas con algo, tu startup no funcionará tan bien como podría haberlo hecho. Asegúrate de concentrarte en todas las áreas de tu negocio porque si un área no funciona, todo lo demás se verá afectado.
- Impaciencia
Al intentar iniciar una empresa, debes ser paciente. Esta es una de las cosas más importantes que debes recordar al iniciar tu propio negocio. Si tienes una idea y quieres empezar de inmediato, ¡genial! Demuestra que te apasiona lo que haces y que estás ansioso por compartirlo con el mundo, algo de lo que cualquier emprendedor debería estar orgulloso. Sin embargo, algunas cosas requieren tiempo y paciencia antes de que puedan tener éxito.
Al aprender todo sobre tu industria, la paciencia es clave. Cuando alguien pregunta: «¿A qué te dedicas?» no debe haber dudas sobre cuánto conocimiento deben esperar de alguien que es dueño de su propio negocio (o quiere serlo). La paciencia también te ayuda con la creación de redes, permitiéndote acceder a contactos profesionales y conexiones personales.
- No conocer a la competencia
Si no conoces a la competencia y cómo se está desempeñando, tomarás decisiones basadas en suposiciones deficientes. Esto puede conducir a resultados desastrosos. Necesitas saber qué hacen bien, cómo lo hacen y qué no hacen. Como fundador de una startup, puedes decidir colocar tu negocio en la mejor posición posible para el éxito.
- Rendirse antes de intentarlo
El fracaso debe verse como una oportunidad de crecimiento, no como una señal de que es necesario renunciar. Al ver cada intento como un experimento en lugar de algo que debe tener éxito o fallar solo en función de tu resultado (o la falta de él), puedes aprovechar todas las oportunidades que surgen con el fracaso: comentarios, lecciones de aprendizaje y futuros esfuerzos de perfeccionamiento.
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