El presupuesto es un documento clave para cualquier autónomo, sobre todo si presta servicios o si el precio de sus productos varía según las necesidades del cliente. En algún momento tendrás que hacer tu primer presupuesto y tendrás que poner especial cuidado en ello porque en él, además de plasmar la información referente al precio de tu trabajo, va a ser tu carta de presentación ante el cliente.
Es posible que tu primera toma de contacto con el cliente sea a través del presupuesto, por lo que se convierte en una herramienta que debes usar con cuidado. Un uso incorrecto puede ser determinante para que pierdas un cliente.
Por supuesto, el precio es un factor determinante a la hora de que el cliente se decida, pero un presupuesto puede aportar un valor añadido mostrando tu experiencia o incluyendo técnicas de marketing para hacer tu oferta más atractiva para el cliente.
A continuación, te contamos qué debes tener en cuenta a la hora de hacer un presupuesto y qué información debes poner.
Criterios para fijar el precio en tu presupuesto
Existen algunos criterios que debes tener en cuenta a la ora de calcular el precio final de tu presupuesto.
- Cubrir costes: antes de nada debes analizar cuál es el precio de tu hora de trabajo. A esto debes añadir el precio de los materiales o gastos asociados al trabajo que vas a realizar.
- Margen de beneficio: sobre el coste d ellos trabajos tienes que definir un porcentaje de beneficio empresarial. Esto va a depender de tu estrategia comercial con el clientes y de si los costes son los suficientemente bajos como para permitirlo.
- Precio de mercado: es básico que tengas una referencia de los precios de tu competencia y también saber hasta dónde está dispuesto a llagar tu cliente.
- Promociones: si quieres hacer más atractiva tu oferta puede valorar realizar alguna promoción.
Errores que debes evitar al fijar el precio
A la hora de fijar el precio, debes evitar dos errores muy comunes:
- Un precio demasiado bajo: poniendo un precio demasiado bajo estás infravalorando tu trabajo y el precio de tu producto o servicio. Además, no vas a cubrir costes. Piensa que si comienzas con precios bajos, el incrementarlos más adelante para obtener beneficios que te merezcan la pena te costará mucho.
- Un precio demasiado alto: si te pasas en el precio y lo pones mu por encima del de tu competencia te puede hacer perder clientes. Si optas por precios elevados, por encima del de tus competidores, debes justificar ese incremento añadiendo un valor que equilibre la relación calidad-precio.
Qué debes incluir en tu presupuesto
- Tus datos: Bien seas autónomo o pyme es obligatorio que incluyas tus datos. Nombre, NIF o CIF y tu domicilio social.
- Datos de tu cliente: También debes incluir los datos de tu cliente poniendo el su nombre, NIF o CIF y su domicilio social. También es importante que incluyas sus datos de contacto como el teléfono o email, aunque estos no son obligatorios.
- Describe el servicio que vas a prestar: Este punto es importante que lo detalles al máximo para que no haya malentendidos. Tienes que desglosar parte por parte, separando la mano de obra y materiales. Especifica todo de manera individua y luego agrupa los mismos elementos.
- Fecha en la que finaliza tu oferta: Debes introducir la fecha de validez del presupuesto para que tu cliente sepa el plazo que tiene para aceptarlo, al igual que debes señalas los posibles recargos por retrasos o imprevistos.
- Precio total y desglosado: Debe contener un desglose de los precios en caso de contener diferentes partes, y la suma total de los mismos. Ten en cuenta que esos importes van sin IVA, pero puedes detallar el tipo aplicable o incluirlo aparte. Si para prestar el servicio presupuestado necesitas algún tipo de apoyo técnico como transporte, un alquiler de maquinaria, un seguro o cualquier otro gasto extra, deberás dejarlo también reflejado. Por último, deberás poner el precio total del trabajo, con el IVA incluido.
- Forma de Pago: Es fundamental detallar como se va a efectuar el pago. Transferencia, efectivo, etc. También debes detallar los plazos de límite de pago y los anticipos, si los hay. Recuerda que la factura proforma también es un tipo de presupuesto y puedes utilizarla igualmente.
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