Desde evitar a las personas negativas, hasta buscar maneras de ayudar a los demás, estas son las cosas que las personas que son felices en el trabajo han descubierto.
Pero cuando se trata de los resultados de investigaciones sobre la felicidad en la fuerza de trabajo, las estadísticas no son halagüeñas.
Una encuesta de la empresa de personal Manpower Group descubrió que casi dos tercios de los trabajadores estadounidenses y canadienses no estaban contentos con su trabajo. Y otra encuesta de Gallup encontró que cerca del 60% de los trabajadores estadounidenses estaban lo suficientemente infelices en sus trabajos como para querer una nueva carrera o empleo.
Es decir, que la mayoría de gente tiene un trabajo que, en algún momento, no cumple con las expectativas. Pero, independientemente de tal situación laboral, hay unos hábitos que las personas que han encontrado la felicidad en sus trabajos han descubierto:
Se han comprometido a mejorar continuamente, como un objetivo de por vida
Las personas más felices creen en hacer lo mejor que pueden, ya sea que les den o no crédito por el trabajo que hacen. Dar lo mejor de ellos les hace sentir mejor consigo mismos. Crea carácter, construye autoestima y forma buenos hábitos de trabajo ,que los beneficiarán en el futuro, independientemente de si alguien en su posición actual lo nota o se preocupa por ello.
Tienen metas por las que vale la pena esforzarse
Las personas con objetivos claros para los que están trabajando son capaces de ver más allá de los irritantes y problemas cotidianos en el lugar de trabajo. Saben que serán temporales y que podrán ver más allá de ellos. Cuando las cosas no van bien, se centran en sus objetivos ,en lugar de en la situación negativa que los rodea en el trabajo.
No quedan atrapados en cuestiones que escapan a su control
Las personas más felices no se dejan atrapar emocionalmente en vibraciones negativas o chismes que son tóxicos en el lugar de trabajo. Se enfocan en el trabajo manual y en lo que pueden hacer. Evitan involucrarse en problemas y conflictos que no los involucran y están más allá de su área de participación. Siempre enfocan su atención y energías en las áreas que tienen el control, lo que les da una sensación de satisfacción.
Están dispuestos a ayudar a los demás
Las personas felices siempre buscan maneras de ayudar a los demás. Investigadores de la Universidad de Wisconsin-Madison descubrieron que las personas que ayudaban a otros en el trabajo eran más felices que las que no lo hicieron. Mientras que ayudar a otros puede conducir a la promoción, también hay cálidos sentimientos de satisfacción que provienen de ayudar a nuestros congéneres.
Evitan a las personas negativas tanto como sea posible
Cuando se encuentran con una persona negativa o quejica crónica en el trabajo, las personas felices encuentran la forma de enfocarse en encontrar soluciones o mirar la situación desde otro ángulo.
Su energía positiva a menudo hace que los quejosos y llorones los eviten, ya que saben que no recibirán un oído comprensivo. Las personas felices son conscientes de que las personas negativas son una pérdida de energía y, por eso, encuentran formas de limitar la cantidad de tiempo que tienen que pasar con ellas.
Hacen de la gratitud una parte integral de sus vidas
Mientras luchan por más en la vida, las personas felices están constantemente al tanto de todas las razones por las que deben estar agradecidos. Expresan su gratitud libre y abiertamente y, al mismo tiempo, se apresuran a dar las gracias a aquellos que los ayudan o hacen un acto amable. Esta actitud de gratitud atrae a las personas a la energía positiva que emiten. Los colegas quieren estar cerca y trabajar con ellos. Cuando las cosas no van bien, eligen enfocarse en todas las cosas que han ido bien en sus vidas.
Manejan sus emociones y tienen sentido del humor
Las personas felices automáticamente intentan aprovechar al máximo cada situación, ya sea en el trabajo, en el hogar o en el juego. Han descubierto que pueden cambiar sus emociones sonriendo o pensando en situaciones cómicas. También pueden distraerse pensando en lugares y momentos agradables, felices y divertidos.
Cada vez que surge una situación que amenaza con envolverlos en energía negativa, confían en su capacidad para elevarse por encima de ella y permanecer en un espacio mental positivo.
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