En EE.UU. se está viviendo un nuevo tipo de crisis laboral llamada La Gran Dimisión que consiste en que los empleados están abandonando sus puestos de trabajo al no estar satisfechos con las condiciones laborales. Según la Secretaría de Trabajo de este país, el pasado mes de septiembre 4,4 millones de trabajadores dejaron sus puestos de trabajo de forma voluntaria, el número más alto desde hace veinte años, momento desde el que se tienen registros.
Pero aún así, las compañías no están siendo capaces de suplir estas vacantes, ya que esos puestos no resultan atractivos para los nuevos trabajadores. Las expectativas no contemplan que esta tendencia se frene, sino que va a ir en aumento a corto plazo.
Se está produciendo una disonancia entre las empresas y los trabajadores, que comenzó con la llegada de las restricciones de la COVID-19, y es importante conocer los motivos de estas diferencias a fin de que esta crisis de empleo no se extienda al resto de países. En este contexto, los departamentos de Recursos Humanos se están revelando como el principal puente de comunicación entre las empresas y los empleados, ayudando a crear un punto de encuentro en el que todas las partes puedan expresarse y sentirse escuchadas. El objetivo es encontrar las nuevas claves de la relación entre empresas y trabajadores, dar respuesta a las nuevas necesidades que demanda la actualidad y que todas las partes salgan fortalecidas y beneficiadas por este nuevo acuerdo.
Con la finalidad de cimentar las nuevas relaciones laborales que se están formando hoy en día, Sodexo ha presentado algunas medidas que los departamentos de Recursos Humanos pueden tomar:
- Escuchar y brindar apoyo incondicional a los empleados: según un reciente estudio de Weber Shandwick, el 49% de los trabajadores se encuentra exhausto y otro 29% considera que no recibe suficiente apoyo de sus responsables para realizar su trabajo. Es decir, que se encuentran sobrepasados y sienten que no se les escucha. Es fundamental que los departamentos de Recursos Humanos tengan en cuenta poner a disposición de los empleados las herramientas necesarias para dar a conocer estas situaciones, a fin de detectarlas cuanto antes e informar a la dirección. Resulta imprescindible conocer los problemas de la organización para poder aportar soluciones cuando sucedan.
- Fomentar políticas de igualdad: la Organización Internacional del Trabajo considera que las empresas que cuentan con políticas inclusivas aumentan su productividad en un 62%. Los entornos laborales tienen que ser cada vez más abiertos e inclusivos, respetando la igualdad de género y fomentar la inclusión de minorías sociales. Acabar con las brechas todavía existentes y eliminar los techos de cristal es necesario para crear entornos de trabajo modernos, justos y saludables, una gestión del talento que también redunda en beneficio de las propias empresas.
- Potenciar nuevas formas de retribución centradas en lo cualitativo: según el estudio Randstad Employer Brand Research 2021, en España la conciliación (66%) es uno de los factores más tenidos en cuenta por los trabajadores en un trabajo y según datos de Sodexo, el 95% de las compañías que ofrecen servicios para mejorarla ven un aumento de la productividad. Incluir formas de retribución flexible, como los cheques guardería, están enfocadas a mejorar el equilibrio entre vida personal y laboral y son más valoradas por los trabajadores.
- Ofrecer planes de carrera y formación: que la empresa piense en el futuro del empleado puede crear vínculos muy fuertes entre ambos. Que el empleado sepa que la empresa invierte en él, que quiere formarle de cara al futuro o que tienen en cuenta su transformación digital para que sus conocimientos sigan siendo actuales son elementos que sirven para crear un ambiente de confianza y de valoración del trabajo, ya que se transmite una proyección laboral futura, centrada en lo que el profesional puede aportar más adelante, lo que lleva a crear una relación estable y duradera. Disponer de planes de formación, idiomas, mejora de capacidades técnicas o de habilidades, son formas excelentes de crear puestos de trabajo atractivos y mejora dinámica entre la empresa y los empleados.
- Prestar atención a la salud mental: según datos de The Lancet, desde 2020, los cuadros de ansiedad se han incrementado en un 26%, afectando principalmente a las mujeres y a los jóvenes. Además, las consultas psicológicas han aumentado alrededor de un 20%, según el Colegio Oficial de Psicología de Madrid. Uno de los retos que tienen las empresas hoy en día es velar por la salud de sus empleados, lo que no solo implica centrarse en el bienestar físico, si no en un sentido más amplio, por lo que también hay que poner especial atención al estado emocional. Crear condiciones laborales estables y libres de toxicidad, así como disponer de planes de salud física y mental son formas excelentes de demostrar que la empresa vela por el bienestar de sus profesionales.
Evitar la fuga de talento ha de ser una tarea prioritaria para los departamentos de Recursos Humanos, especialmente en un momento como el actual, en el que la pandemia ha trastocado las motivaciones e intereses de los profesionales. La escucha activa es un recurso esencial para conocer las necesidades de los empleados y, así, poder darles soporte y solución, una asistencia que, sin duda, fortalece la relación entre trabajadores y empresa.
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