En estos momentos, es fácil sentirse fuera de contacto con tu gerente. Un breve saludo en el pasillo o una breve reunión de cinco minutos podía ser todo lo que tenías en un día determinado.
Pero esos encuentros pasivos pueden parecer muy gratificantes en comparación con el silencio que proviene de un jefe que trabaja de forma remota. Has estado en llamadas de Zoom y chats de Slack, pero no parece que estéis en contacto.
¿Qué puedes hacer para recuperar esa conexión personal con tu jefe, especialmente si no es comunicativo? Prueba estas cinco estrategias.
- Di gracias: Todo el mundo quiere ser apreciado, incluso un jefe que puede parecer autónomo o distante. Si tu equipo se ha alejado recientemente por el teletrabajo, es probable que tu gerente esté atravesando un momento caótico, por lo que su lejanía podría no tener nada que ver contigo. Si tienes oportunidad, agradécele su ayuda para facilitar la transición.
- Informa a tu jefe en un proyecto: Una de las formas más fáciles y útiles de conectarte es comunicar e informar a tu jefe sobre los avances de un proyecto en el que estás trabajando. Supón que has estado trabajando en un plan de marketing durante un mes y no has recibido una llamada o mensaje de texto de tu jefe preguntando «¿Cómo te va?». Estás perdiendo entusiasmo porque piensas que el silencio de tu gerente significa que no le importa tu trabajo. Eso no es necesariamente cierto. Una mejor respuesta que enfadarse es contactar e informar a tu gerente, compartir tu entusiasmo por el proyecto y contarle cómo va. Esto hará dos cosas: dar un impulso y reavivar tu relación con tu jefe, y que se inspire en tu compromiso.
- Seguimiento tras una reunión: Las reuniones virtuales no proporcionan el mismo refuerzo personal que las reuniones cara a cara tradicionales. Es difícil mirar una pantalla y sentir el calor y la energía provenientes del otro lado. Como resultado, podemos sentir que a nadie le importamos o que nuestro jefe nos ignora. No estés triste o callado, pero toma medidas. Envía a tu gerente un correo electrónico o mensaje de texto que diga: «Gran reunión» o «Disfruté la discusión de hoy”. Esto te ayudará a sentirte más comprometido porque has restablecido una conexión con esta persona importante en tu vida profesional. Y quién sabe, esto podría llevar a un correo electrónico de respuesta. Incluso un «agradecimiento» de tu gerente eliminará la lejanía de la relación.
- Comparte una victoria: Otra excelente manera de conectarte es compartir algunas buenas noticias. Digamos que has estado trabajando de forma remota en algunos proyectos de clientes y te sientes deprimido porque tu jefe no ha mostrado mucho interés en tus esfuerzos. Hoy un cliente te aceptó un proyecto; estás entusiasmado con esta nueva fuente de ingresos y quieres compartir las noticias con alguien que no sean tus tres hijos y el perro de la familia. Es probable que a tu jefe le encante esta buena noticia si solo ha estado escuchando sobre la necesidad de controlar los costos en medio de la disminución de los ingresos. Ponte al teléfono o envía un mensaje. A ti te hará sentir genial, y a él le alegrarás el día.
- Ofrece una idea: Finalmente, vuelve a conectarte con tu supervisor ofreciéndole una idea. No tengas miedo de ser demasiado directo. Las organizaciones de hoy no son las jerarquías que alguna vez fueron, y todos nosotros, independientemente del nivel, deberíamos aprovechar las oportunidades para presentar ideas y mejorar nuestro papel y valor. Entonces, si tienes una idea, habla. Mientras la compañía lucha con los desafíos de la pandemia, mantén el pulso en las soluciones dentro de tu propio dominio. Incluso si tu idea está en la etapa inicial de desarrollo, dile a tu jefe: «Sé que tienes mucho trabajo, pero aquí hay algo en lo que he estado pensando». Cualquier gerente estará encantado de escuchar algo más que las consecuencias de la pandemia. Y en este entorno empresarial que cambia rápidamente, las nuevas ideas son doradas.
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