Lanzar y administrar una empresa no es poca cosa, pero sus recompensas pueden ser enormes. Muchos aspirantes a empresarios tienen grandes ideas para nuevas empresas, pero las ideas son baratas y la ejecución lo es todo.
Estas son algunas claves que debes saber antes de comenzar tu propia empresa.
El fracaso es parte del proceso
El éxito nunca es lineal. Cada emprendedor exitoso ha pasado por innumerables fracasos y ha aprendido de ellos a medida que ha ido creciendo. Peter Thiel, cofundador de PayPal, es solo un ejemplo de un empresario que fracasó mucho antes de su gran éxito. El primer fondo de Thiel, Clarium Capital, perdió el 90% de sus activos estimados en 7 mil millones de dólares en 2010.
Las personas tienden a centrarse en los éxitos de los demás y pasan por alto sus fracasos. Recuerda, las lecciones aprendidas al fallar brindan a los empresarios las habilidades necesarias para ejecutar mejor sus planes de negocio en el futuro.
Los estudios han demostrado que la edad promedio de los líderes de startups de alto crecimiento es de 45 años. Nunca es demasiado tarde para comenzar, especialmente porque los empresarios mayores a menudo tienen una gran experiencia, fracasos y lecciones de vida que pueden aprovechar.
El emprendimiento puede consumir tu vida
Muchos empresarios describen su empresa como su «bebé». En los primeros años, exige más atención y cuidado; con el tiempo, sin embargo, las bases de la compañía se fortalecen.
Los emprendedores más exitosos aman y se apasionan por su trabajo. Confían en que su producto o servicio es algo que el mercado necesita. Recuerda, nada que valga la pena es fácil, y tendrás que sacrificar una gran parte de tu tiempo libre para poder darle a tu startup la atención que necesita para prosperar.
A veces, dudarás de ti mismo
La duda es una emoción humana normal, especialmente si has estado trabajando en tu startup por un tiempo sin ver mucho éxito. Una forma de superar las dudas es mediante el análisis de lo que has hecho bien y qué puedes hacer mejor.
Tomar notas a lo largo de tu viaje de inicio es una buena manera de recordar eventos pasados. Como emprendedor, probablemente tu vida a veces será agitada, por lo que tomar notas o escribir un diario es una herramienta esencial para analizarte.
Siempre podemos ser mejores y hacerlo mejor. Dudar demasiado de ti mismo dificultará tu productividad. Es por eso que la confianza es un rasgo importante que cualquier emprendedor debe poseer. Exudar confianza infunde confianza en todos los que te rodean, ya sean tus clientes, tu equipo o tus inversores.
Los primeros años son especialmente desafiantes
Según las estadísticas, solo el 50% de las empresas con empleados sobreviven los primeros cinco años, y solo un tercio sobrevive 10 años o más. Estos números reflejan lo difícil que es iniciar una empresa exitosa.
Formar un equipo fuerte es un paso importante para reducir las posibilidades de fracaso. Tu equipo debe tener una amplia gama y una gran experiencia. Siempre habrá alguien por ahí que sepa algo que tú no sabes.
El emprendimiento puede venir con mucha satisfacción
Los datos de Gallup han demostrado que el 85% de las personas en todo el mundo no disfrutan en sus trabajos. Por otro lado, muchos empresarios aman su trabajo, les encanta lo que hacen. La satisfacción laboral no tiene precio, y puede ser un factor importante que contribuye a una vida feliz y plena. Si no estás satisfecho con tu trabajo actual, puede ser hora de comenzar a pensar en buscar esa startup que siempre has soñado crear.