Durante las entrevistas de trabajo, los candidatos se esfuerzan por dar lo mejor de sí mismos y brindar respuestas reflexivas e impresionantes a las preguntas del entrevistador. Si bien hay innumerables preguntas de entrevista que un entrevistador puede hacer durante la reunión, es crucial que los entrevistados se aseguren de que las respuestas que dan no estén obsoletas.
No importa si una posible contratación solo dice lo que cree que el entrevistador quiere escuchar o si ha buscado cómo responder una pregunta «correctamente»; algunos entrevistadores pueden cansarse de una respuesta aparentemente ensayada.
A continuación, te mostramos las 10 respuesta de entrevista ensayadas que los gerentes de contratación están cansados de escuchar y lo que los candidatos deberían decir en su lugar.
- “Trabajo demasiado duro”
“Mi debilidad es que trabajo demasiado”, o alguna otra variación de esta frase, presenta un equilibrio deficiente entre el trabajo y la vida como una debilidad cuando el candidato claramente tiene la intención de presentarlo como una fortaleza. Los empleadores quieren que sus empleados estén sanos mental y físicamente, y un buen equilibrio entre el trabajo y la vida es clave para eso.
Además, esta respuesta también le dice al entrevistador que el candidato no puede mostrar debilidad. Esto creará problemas en el futuro, ya que el candidato debe trabajar en equipo. Los equipos están destinados a apoyar las debilidades de los demás, y si un miembro se niega a reconocer su debilidad, el equipo no puede apoyar a esa persona. En su lugar, el candidato debería demostrar que realmente es consciente de sí mismo y tratar de identificar las áreas en las que puede necesitar apoyo en el futuro, lo que también indica una receptividad a la retroalimentación.
- “No tengo debilidades”
Una pregunta común que surge durante las entrevistas de trabajo es «¿Cuáles son tus puntos fuertes?» Esta pregunta puede ser difícil de responder y, a menudo, es la primera que hacen los entrevistadores. Es casi como una forma de romper el hielo e iniciar una conversación. Pero hay algunas respuestas que la gente parece abusar, como “Soy un jugador de equipo” o “Trabajo bien con los demás”. Otra respuesta que los gerentes están cansados de escuchar en las entrevistas es: “No tengo debilidades”. Esta es una respuesta muy general y realmente no dice nada sobre el conjunto de habilidades de alguien.
Si, en cambio, el candidato habla de una debilidad específica, entonces sería mejor decir algo como «No soy bueno hablando en público» o «No soy bueno administrando personas».
- “Soy un solucionador de problemas”
Una frase usada en exceso es: «Soy un solucionador de problemas». Si esa respuesta se elabora, funciona bien. Pero muchos candidatos dan esa respuesta y esperan que sea una respuesta suficiente. El gerente querrá saber saber qué convierte al aspirante en un solucionador de problemas.
¿A qué desafíos se enfrentó y cómo los superó? Incluir estos detalles adicionales puede marcar la diferencia durante la entrevista.
- “Soy responsable”
¿Quién no es responsable cuando está solicitando un trabajo que requiere que se tenga la capacidad de trabajar en algo y asumir una tarea? Esta frase se usa en exceso y aparentemente no tiene sentido, especialmente cuando no hay sinceridad y la respuesta no está respaldada por la importancia de su función.
Todos pueden decir que son responsables, pero no se puede probar hasta que haya coherencia e iniciativa de su parte.
- “Quiero ser gerente en dos años”
Cuando un candidato dice algo como “Quiero ser gerente en dos años”, envía una señal equivocada. Si bien los candidatos deben ser ambiciosos, una declaración como esa muestra una falta de experiencia y autoconciencia. Se necesita confianza para que un empleado asuma un rol superior con autoridad y responsabilidades. Alguien en un puesto de alto nivel necesita administrar a sus compañeros de equipo, y tiene que hacer avanzar a la empresa. Alguien que es nuevo no sabrá cómo funciona la empresa ni conocerá a la gente que trabaja allí. Que alguien declare que quiere ser gerente en un corto período de tiempo no tiene sentido.
En cambio, un candidato podría decir que está dispuesto a aprender y eventualmente asumir un rol de liderazgo. Un enfoque maduro y reflexivo como este puede marcar una gran diferencia.
- “Soy un perfeccionista”
En respuesta a «¿Cuál es tu mayor debilidad?», la reacción instintiva de la mayoría de las personas es dar una respuesta como «Trabajo demasiado» o «Soy un perfeccionista». Si bien estas respuestas pueden hacer parecer a un candidato un buen empleado, también resultan poco sinceras.
Una mejor manera de responder a esta pregunta es dando un ejemplo de un momento en el que se tuvo problemas en el lugar de trabajo pero se pudo superar el desafío. Por ejemplo: “Solía luchar con la administración del tiempo, pero he desarrollado algunas estrategias que me ayudan a mantener el rumbo”. Esta respuesta muestra que el candidato está dispuesto a admitir sus debilidades y, sin embargo, es proactivo en la búsqueda de soluciones. También muestra sus características intrínsecas y deseo de desarrollo continuo.
- “No me gustaba mi jefe”
Una respuesta que escucha en exceso cada vez que se pregunta a alguien por qué dejó su trabajo anterior es: «No me pagaban lo suficiente» o «No me caía bien mi jefe». Hay que tener en cuenta que el entrevistador está tratando de evaluar si el candidato es el problema, no el trabajo.
El candidato debe tratar de cambiar la conversación hacia la nueva oportunidad que se presenta. Una mejor respuesta sería decir que no vio muchas oportunidades con su empleador anterior, y cuando se enteró de esta nueva oportunidad, vio un potencial crecimiento profesional y financiero. No importa lo que pregunte el entrevistador, el candidato debe concentrarse en presentar su caso de por qué es el mejor candidato para el trabajo. Destacar sus habilidades, impacto y conocimiento de la empresa a la que se postula.
- “Tengo mucha experiencia”
«Tengo mucha experiencia». Esta respuesta se escucha en personas que llevan un año en un trabajo sin experiencia. Por otro lado, también se escuchada “tengo mucha experiencia” de personas que llevan más de tres años en un trabajo y todavía no han adquirido ninguna experiencia.
Es importante resaltar las habilidades o, si se tiene alguna experiencia en un trabajo o una pasantía, el candidato puede decir cómo estas habilidades le ayudaron a sobresalir. Puede compartir su experiencia personal sobre cómo usó esa habilidad.
- “Aprendo rápido”
Muchos gerentes de contratación desconfían de los candidatos que afirman que deberían ser contratados porque aprenden rápido y pueden trabajar rápido en todo lo que hacen. Puede ser cierto, pero apenas hay una escala para calificar a los candidatos de trabajo en estos atributos, por lo que tiene poco valor para la mayoría de los gerentes. Además, ser un trabajador rápido no significa que el trabajo resulte ser de alta calidad.
Es preferible que un candidato diga que está dispuesto a aprender todo sobre la empresa y que puede trabajar de manera eficiente en la mayoría de las tareas con la instrucción adecuada. Esta es una respuesta más reflexiva y auténtica que muestra que el solicitante de empleo es diligente y busca ser un empleado a largo plazo.
- “Trabajo duro”
Una respuesta de entrevista de trabajo ensayada y usada en exceso es: «Trabajo duro». Enumerar las cualidades generales está desactualizado y no tiene peso.
En su lugar, sería mejor ampliar eso y contar más sobre lo que el candidato ha logrado que demuestre que está trabajando duro. Ya sea que el candidato acabe de terminar la universidad o tenga 10 años de experiencia, ahora es mejor presentar números, metas e hitos que se hayan superado. Las empresas quieren saber cómo un candidato puede contribuir a su éxito, y lo mejor es que el candidato demuestre que será un activo para la empresa.
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