Nos pasa a todos en algún momento. Estás haciendo algo en tu ordenador, ya sea un proyecto importante, un poco de navegación sin rumbo o tratando de superar tu puntuación más alta en el Solitario y, sin previo aviso, algo sale mal. Tu ordenador se apaga, o la pantalla parpadea o se congela.
A veces es solo un fallo que desaparece rápidamente. Pero a veces mueves el ratón, haces clic en los botones varias veces, tocas algunas teclas de tu teclado y no obtienes nada. Tu pieza de tecnología del siglo XXI es inútil. ¿Entonces, qué haces a continuación?
La mayoría de nosotros nos sentimos cómodos usando ordenadores, siempre y cuando todo funcione sin problemas. Pero, cuando algo sale mal, no sabemos por dónde empezar. Es por eso que aludimos a cinco problemas comunes de ordenador que normalmente puedes resolver por ti mismo/a. Solo necesitas saber cómo solucionar el problema. Echa un vistazo a estos consejos para que estés listo/a la próxima vez que su ordenador falle.
Reinicios inesperados
Si tu ordenador alguna vez se reinició de manera inesperada y se puso azul o se apagó sin previo aviso, sabes lo devastador que puede ser. O, ¿tu ordenador se ha apagado alguna vez cuando se está abriendo, o sugirió que trabajes en «modo seguro»?
Esos mensajes de «modo seguro» a menudo aparecen después de que apagas accidentalmente tu ordenador. Pero cuando eso sucede sin razón aparente, es posible que tengas un problema costoso.
Sin embargo, puedes solucionar este problema con un programa llamado WhoCrashed. Con el mismo, puedes escanear tu ordenador para identificar el problema y el programa puede sugerir una solución.
Si estás mirando una pantalla azul, puedes estar pensando: «Hay un problema con mi ordenador». Pero, según WhoCrashed, el problema probablemente no tenga nada que ver con tu hardware.
Puede estar relacionado con los controladores de tu dispositivo. O puede ser un problema con las piezas de codificación llamadas módulos del núcleo.
WhoCrashed analizará tu ordenador para descubrir qué está causando que se bloquee. Es fácil de usar y hace un análisis exhaustivo de tu ordenador.
Nota: WhoCrashed afirma que «no se garantiza que el software identifique al culpable en todos los escenarios».
Si te ayuda, genial. De lo contrario, debes asegurarte de que los controladores de tu dispositivo estén actualizados. Si eso no ayuda, es posible que debas comunicarte con una persona profesional de reparación de ordenadores.
Solución de problemas básicos del software
Una congelación ocasional o constante del ordenador podría ser el resultado de un programa. Usa el atajo de teclado CTRL + MAYÚS + ESC para abrir el Administrador de tareas de Windows y luego selecciona la pestaña «Rendimiento». En Windows 8.1 y 10, es posible que debas hacer clic en el enlace «Más detalles» en la parte inferior del Administrador de tareas para verlo.
Comienza a usar tu ordenador como de costumbre, pero vigila las categorías de CPU, memoria y disco. Toma nota de qué área estaba realmente alta, luego reinicia el ordenador y abre nuevamente el Administrador de tareas.
Esta vez, sin embargo, elije la pestaña «Procesos». Ordena la lista por CPU, memoria o disco, lo que estaba realmente alto la última vez que el ordenador se paró o colapsó, y mira qué proceso aparece en la parte superior de la lista a medida que el ordenador se para. Esto debería indicarte qué software está funcionando para que puedas desinstalarlo o actualizarlo.
También es posible que tengas software oculto, como un virus, que cause problemas. Asegúrate de ejecutar un escaneo con tu software de seguridad para descubrir algo que no debería estar ahí.
En los casos donde tu ordenador se congela durante el inicio en modo normal, pero se inicia OK en modo seguro, el problema podría ser un programa que se carga durante la secuencia de inicio. Usa un programa como Autoruns para desactivar selectivamente los programas que comienzan en el inicio y ver cuál está causando el problema.
Si tu ordenador se congela durante el inicio sin importar nada, y está en el mismo punto, entonces el problema podría ser de corrupción en Windows o un problema de hardware. Una manera rápida de saberlo es aplicar otro sistema operativo y arrancar con eso.
Si el otro sistema operativo se inicia correctamente, entonces probablemente estés viendo un problema con Windows y es posible que debas volver a instalarlo. Para aquellos que usan Windows 10 (y 8), tiene una función Actualizar / Restablecer que se supone que devolverá Windows a un estado de fábrica. Está en Configuración >> Actualización y recuperación >> Recuperación. Si Windows tiene problemas para iniciarse, debería aparecer una opción de recuperación durante el arranque que incluya esto, o es posible que debas usar un disco.
Si el sistema operativo que no es Windows también tienes problemas, entonces es hora de ver tu hardware.
Solución de problemas básicos de hardware
Un ordenador que se congela tanto en modo normal como en modo seguro o con otro sistema operativo, a menudo puede indicar un problema con el hardware del mismo. Podría ser su disco duro, una CPU sobrecalentada, mala memoria o una fuente de alimentación defectuosa. En algunos casos, también podría ser su placa base, aunque eso es algo raro.
Por lo general, con un problema de hardware, la congelación comenzará esporádicamente, pero aumentará la frecuencia con el paso del tiempo. O se activará cuando el ordenador esté trabajando duro, pero no cuando esté haciendo cosas más básicas. Afortunadamente, puedes realizar algunas comprobaciones y ver si ese es el caso.
Usa un programa como CrystalDiskInfo para verificar los datos SMART de tu disco duro en busca de signos de fallo inminente. Un programa como SpeedFan puede decirte si el procesador de tu ordenador se está sobrecalentando, o si los voltajes fluctúan, lo que podría ser una fuente de alimentación problemática.
Si deseas profundizar más, puedes obtener un CD de diagnóstico como el Ultimate Boot CD de FalconFour. Tiene muchas otras herramientas para revisar tu ordenador, incluyendo MemTest para poner presión en la memoria RAM de tu ordenador para ver si está funcionando bien.
Si tu ordenador es muy nuevo, aún podría estar bajo garantía, en cuyo caso querrás ponerte en contacto con el fabricante o vendedor.
Para un ordenador más antiguo, debes decidir si es menos costoso repararlo o reemplazarlo. Averigua en qué punto debes reducir tus pérdidas.
Pop-ups y mensajes publicitarios
Un anuncio emergente mientras estás navegando solía ser una gran molestia, pero los navegadores modernos incluyen protección emergente para mantener estas molestias lejos en la mayoría de los sitios. Si aún estás viendo ventanas emergentes regulares en más de un sitio, podría ser debido a un navegador mal configurado.
Sin embargo, si aparecen ventanas emergentes cuando tu navegador ni siquiera está abierto, es probable que tengas un virus. Esto es especialmente cierto si las ventanas emergentes publican algún remedio mágico para todos tus «problemas de virus».
Si te bombardean con anuncios emergentes, primero ejecuta un escaneo con software anti-spyware para verificarlo dos veces. SpyBot Search & Destroy profundizan en tu configuración para encontrar cualquier problema que el spyware haya dejado atrás.
La mayoría de los virus tienen un objetivo en mente una vez que infectan tu ordenador: propagar el virus lo más posible. Una manera fácil de hacerlo es enviar mensajes a tantos amigos como sea posible, con la esperanza de que se infecten también.
Estos mensajes pueden aparecer en cualquier lugar. El virus podría intentar enviar spam a través de tu cuenta de correo electrónico. Podría tomar el control de tu Facebook o Twitter y enviar correo no deseado, también. En casi todos los casos, incluirá un enlace o archivo adjunto al virus en algún lugar de la publicación.
Hay que mantenerse alerta en relación a la carpeta «enviada» de tu correo electrónico y en las publicaciones de tu red social. Si observas correos electrónicos y publicaciones que no recuerdas haber enviado o publicado, es probable que tengas un virus. Esto es lo que necesitas saber para recuperar tu cuenta.
Poner las cosas en marcha de nuevo
Esto puede sonar obvio, pero una de las cosas más fáciles que puedes hacer para que tu ordenador funcione mejor es reiniciarlo.
¿Cuántas veces has pasado horas tratando de averiguar qué estaba causando un problema en tu ordenador, solo para que el encargado de TI lo solucione reiniciando? No, el técnico de TI no tiene el «toque mágico». Lo que realmente está sucediendo es que a veces los problemas informáticos son temporales. Cuando reinicies tu ordenador, borra su memoria y vuelve a ejecutar los inicios de programa.
Algo importante que se debe tener en cuenta aquí es que a veces el problema que tiene no te permite reiniciar tu ordenador correctamente. Por ejemplo, si tu ordenador se congela, no podrás reiniciar sin presionar el botón de Encendido y sostenerlo hasta que tu ordenador se apague.
Esto se conoce a veces como un «reinicio duro», y aunque no es ideal, es esencialmente lo mismo que reiniciar.
Otra cosa que puedes hacer, y que es realmente fácil, es limpiar la memoria caché de tu navegador. Esto no solucionará todos los problemas, pero ayuda al darle un espacio en blanco para trabajar.
El proceso es muy fácil. Cada navegador tiene un método diferente, pero aquí es cómo puedes hacerlo en Chrome. Vete a tu historial de navegación, luego haz clic en el botón en la parte superior que dice «Borrar datos de navegación».
Por supuesto, si estas correcciones simples no ayudan, entonces puedes tener un problema más grande de qué preocuparte. También podría ser causado porque tu ordenador necesita una limpieza.
