Pocos activos comerciales son más valiosos que tu lista de correo electrónico. El correo electrónico es la forma en que te mantienes en contacto con tus clientes, nutres a tus clientes potenciales y generas conocimiento de marca. Sin embargo, por muy lucrativa que pueda ser, tu lista de correo electrónico necesita mantenimiento.
A continuación, veremos algunas formas sencillas de mejorar tu lista de correo electrónico y obtener más ventas.
Por qué tu lista de marketing por correo electrónico necesita atención
Más del 22% de tu lista de correo electrónico se vuelve inutilizable en solo un año. Ya sea que los suscriptores cambien o abandonen sus direcciones de correo electrónico, un segmento importante de tu base de datos fallará periódicamente.
Además de los correos electrónicos no válidos que rebotan, puedes tener suscriptores inactivos, que son más que un desperdicio de recursos. Además, podrías terminar con suscriptores que tienen un historial de etiquetar mensajes como spam, y es posible que tú seas el siguiente.
Estos son solo algunos de los riesgos que corres cuando ignoras la higiene de tu correo electrónico. ¿Vale la pena? No, teniendo en cuenta lo fácil que es estar actualizado.
Entonces, veamos algunas formas fáciles de mejorar tu lista de marketing por correo electrónico y obtener los mejores resultados de tus campañas.
- Verifica tu lista de correo electrónico para reducir los rebotes
Los rebotes son algunos de los problemas más comunes que enfrentan los especialistas en marketing por correo electrónico. Pero el deterioro de los datos implica más de lo que parece. Una vez que un correo electrónico se vuelve inválido y rebota, no solo estás desperdiciando la oportunidad de comercializar y vender. También estás poniendo en peligro la capacidad de entrega general de tu correo electrónico, que es la cantidad de correos electrónicos que llegan a la bandeja de entrada con éxito.
Una alta tasa de rebote de correo electrónico es una señal de una mala gestión de la lista de correo electrónico. Es típico de los spammers, a quienes no les importa la calidad de sus datos, simplemente envían y esperan. Los spammers tienen una reputación de remitente terrible, pero las empresas legítimas también pueden ver empañada su reputación. Cuando la tasa de rebote de tu correo electrónico supera el 2%, corres el riesgo de caer en la carpeta de correo no deseado.
Para asegurarte de mantener a raya tu tasa de rebote, ejecuta tu lista de correo electrónico a través de un servicio de verificación de correo electrónico. Recuerda repetir el proceso varias veces al año y eliminar estos datos erróneos.
- Evita las quejas de spam
Las quejas de spam también pueden causar un daño tremendo a la reputación del remitente. El correo electrónico, al igual que las redes sociales, utiliza el comportamiento de las personas para crear algoritmos que ofrecen la mejor experiencia. Cuando las personas se quejan de un remitente de correo electrónico, los proveedores de servicios de Internet toman nota y evitarán que el remitente vuelva a acceder a esa bandeja de entrada.
El marketing con permiso y el envío de contenido relevante de alta calidad son buenas formas de evitar las quejas de spam. Sin embargo, incluso los remitentes más respetuosos con la ley pueden recibir quejas de spam..
- Valida cada nuevo suscriptor en tiempo real
Tienes una mejor oportunidad de llegar a tus suscriptores cuando tienes tus direcciones de correo electrónico actualizadas. Si bien puedes validar tu lista varias veces al año, también puedes verificar cada nuevo contacto que agregues a tu base de datos en tiempo real.
Comunícate con tu empresa de validación de correo electrónico y pregunta sobre la API (Interfaz de programación de aplicaciones). Una vez que agregues este software a tus formularios de registro y suscripción, se verificará cada nueva dirección de correo electrónico antes de permitir que se agregue a tu lista.
El uso de la API garantiza que no haya correos electrónicos falsos y peligrosos que infecten tu base de datos, por lo que puede mantenerse actualizada mientras la construyes. Una buena API sugerirá una corrección cuando tu nuevo suscriptor cometa un error tipográfico. Además, una API puede rechazar direcciones de correo electrónico que pertenecen a denunciantes conocidos. Funciona exactamente como un servicio de validación de correo electrónico masivo, solo que verifica los correos electrónicos en cuestión de segundos.