Acciones cotidianas que posiblemente estés realizando en tu empresa pensando que son productivas, pero no lo son

Las 5 acciones diarias que mantienen tu pequeña empresa

©BigStock

Actualizado 17 | 01 | 2023 09:59

No hay caminos lineales hacia el verdadero éxito. Todos los que lo han logrado algo grande han recorrido un viaje más parecido a una montaña rusa o a un juego de serpientes y escaleras.

Hacer las mismas cosas todos los días durante años probablemente no hará crecer tu negocio a nuevas alturas pero, ¿qué hará? Encontrar las escaleras y evitar las serpientes.

Hay cinco acciones cotidianas que posiblemente estés realizando en tu empresa pensando que son productivas, pero no lo son. A continuación, te contamos por qué están manteniendo tu empresa y lo que debes hacer en su lugar.

  1. Tareas, recados y administración

Hacer cosas muy por debajo de tu potencial te mantiene jugando muy por debajo de tu rango de juego. Sin embargo, lo estás haciendo cuando haces recados, ordenas, lavas la ropa y revisas tu declaración de impuestos. Tan pronto como ganes más de 20 euros por hora, no tiene sentido hacer cosas que podrías subcontratar por menos de 15 euros por hora.

Si hay alguien que puede hacerlo por ti, no lo hagas tú. En su lugar, dedica tiempo a conseguir más clientes o haz cosas que hagan crecer tu negocio. No hay premios para la casa más ordenada, alguien más podría lavar la ropa tan bien como tú, y tu insistencia en mantener las tareas pequeñas te impide abordar las grandes. La externalización es el camino.

  1. Trabajar todo el tiempo

Trabajar sin parar desde que te levantas por la mañana puede estar costando el éxito de tu negocio. Sin descansar, nunca estarás completamente recargado para hacer lo que tienes que hacer. Sin desconectarte a lo largo del día, aunque solo sea por unas pocas horas, tu red de modo predeterminado no puede activarse para resolver los desafíos por ti.

Tu mente necesita descanso y distracción para avanzar. Sin desconectarte intencionalmente a lo largo del día, siempre estás en ondas cerebrales beta, clasificando tareas sin ver el panorama general. Estás arando todo el día, con la cabeza hacia abajo y entre los árboles, y no puedes ver la madera. Perderás las oportunidades que podrían ayudarte a dar el salto porque simplemente no hay espacio.

  1. Multitarea

La multitarea significa tratar de obtener lo mejor de ambos mundos pero terminar con lo peor. Relajarte mientras revisas los correos electrónicos, pensar en el partido de esta noche durante una reunión importante o mirar Instagram en el gimnasio es una pérdida de tiempo. La multitarea es menos un truco de productividad y más una descarga de calidad. El coste de la multitarea es de horas a lo largo del día, por lo que comenzar algo y mantenerlo es la única forma de hacerlo.

En lugar de revolotear entre tareas o trabajar todo el tiempo, separa partes de tu agenda en las que trabajes intensamente en una sola cosa. Luego descansa, cambia o reflexiona. Crea tu día repetible perfecto y planifica tu cadencia de productividad. Habrá una duración de sprint perfecta que se adapte a ti, así que experimenta hasta que la encuentres. Dentro de ese tiempo, apaga todo lo demás y no te sienta tentado a revisar. Siéntate con incomodidad hasta que tu capacidad de atención se alargue y llegues a ese lugar de flujo.

  1. Iniciar proyectos paralelos

Si no estás tan preocupado por tu empresa principal, puedes comenzar proyectos paralelos. Si tu negocio es importante para ti, los proyectos paralelos costarán su potencial. Comprar ese nombre de dominio y registrar ese nuevo negocio sin reconocer que tu energía ahora está dividida es un tipo de ignorancia que no conduce a la felicidad.

Un gran negocio o un montón de pequeños. Tú decides. Si sufres de FOMO y te gusta tener los dedos en cada pastel, continúa. Pero si tienes planes más grandes que eso, cierra otras vías y hazlo todo. Mantén una lista de los negocios que te encantaría iniciar, pero no los inicies. Aprovecha el tiempo y el esfuerzo que ahorraste y haz más con tu negocio principal. Tu futuro yo te lo agradecerá.

  1. Microgestionar

Estar demasiado disponible mantiene tu empresa porque significa que los miembros de tu equipo no están progresando por su cuenta. En lugar de convertirse en personas ingeniosas, independientes y útiles, están a tu sombra y no pueden hacer nada sin tu consentimiento. Estás microgestionando. Si no confías en tu gente, deshazte de ellos. Si confías en ellos, déjales hacer. Pasar el rato en medio de la confusión de estar allí para cada consulta y evaluar cada uno de sus movimientos sofoca su motivación para asumir su papel y ver qué pueden hacer.

Si tu ego no puede soportar que alguien más responda preguntas y resuelva problemas en tu negocio, es culpa tuya. Hay muy pocas emergencias y no es necesario estar ahí todo el tiempo. Cambia algunas de tus horas de oficina por tiempo para hacer un trabajo profundo. Cambia algunas reuniones por meditar sobre la visión de tu empresa. Crea líderes, no gregarios.

Más información


Cargando noticia...