El viaje empresarial a menudo se ha comparado con la construcción de un avión mientras se vuela. Y por emocionante que pueda ser, también puede ser aterrador. Como fundador, ya sea que estés presentando tu nueva idea a inversionistas potenciales, haciendo planes de expansión o contemplando despidos, probablemente estés familiarizado con esa sensación de tener un agujero en el estómago.
Tienes una inmensa responsabilidad. No quieres defraudar a tu equipo, ni a tus clientes, inversores ni a ti mismo. El miedo paralizante al fracaso puede estar justificado. Según datos de la OCDE, más del 70% de las empresas españolas fracasan antes del quinto año desde su creación.
Si bien un poco de ansiedad puede aumentar tu productividad y llevarte al éxito, demasiada ansiedad puede causar una serie de problemas psicológicos y físicos.
Pero con las herramientas adecuadas, puedes pasar de ser un manojo de nervios a una estrella de rock resistente.
¿Qué es la ansiedad en el trabajo?
La ansiedad en el trabajo es cuando sufres de angustia emocional debido a la presión real o anticipada relacionada con tu trabajo. Puedes sentirte estresado, nervioso o tenso por el trabajo.
Los sentimientos de ansiedad en el trabajo pueden desencadenarse por el desempeño financiero de tu empresa, las interacciones con compañeros de trabajo o inversores, hablar en público o sentirte abrumado por demasiadas tareas.
Si crees que tienes ansiedad clínica, es fundamental que busques la ayuda de un profesional de la salud mental. Reconocer que tienes sentimientos de ansiedad en el trabajo es el primer paso para controlarlos.
Señales de que estás ansioso en el trabajo
Si sufres de ansiedad en el trabajo puedes tener dificultades para hacer frente a tus objetivos cotidianos. Es normal estresarte en el trabajo, especialmente cuando tienes plazos que cumplir, pero demasiado estrés puede generar problemas.
Los síntomas pueden incluir:
- Preocupación constante.
- Sentirte cansado e irritable todo el tiempo.
- Tener problemas para dormir.
- Incapacidad para concentrarte y mantener el enfoque.
- Disminución de la productividad en el trabajo.
- Problemas de salud (por ejemplo, malas digestiones, opresión en el pecho, dificultad para respirar, dolores de cabeza crónicos).
¿Qué causa la ansiedad en el trabajo?
Hay muchas causas de ansiedad en el lugar de trabajo, y las razones difieren de persona a persona.
Para algunos, las largas horas, la gestión errática del tiempo y el entorno competitivo y basado en resultados pueden empujarles a un modelo de trabajo en el que se esfuerzan constantemente. Para otros, situaciones específicas, como cuando tienen que hacer presentaciones, hablar durante las reuniones o liderar un gran proyecto, pueden hacer que se estresen.
Identificar qué hay detrás de tu ansiedad puede ayudarte a encontrar la mejor solución para superarla.
Tipos de ansiedad
Hay muchos tipos de ansiedad que pueden afectarte en tu trabajo, pero tres comunes son la ansiedad por el desempeño, la ansiedad social y el síndrome del impostor.
- Ansiedad de rendimiento. Este tipo de ansiedad puede darse cuando tienes un proyecto o una presentación de alto riesgo. La ansiedad por el rendimiento suele ser de corta duración y desaparecerá después de completar la tarea o después de superar el obstáculo inicial para comenzar. La preparación puede contribuir en gran medida a combatir la ansiedad por el desempeño en el trabajo. Si estás ansioso por algo (entrevistas, compromisos para hablar, conversaciones desafiantes), escribe el guion y practica. Eso te hará sentir preparado, lo que calmará tu ansiedad.
- Ansiedad social. ¿Llegas temprano a la oficina solo para evitar encontrarte con tus colegas en el ascensor? ¿Te has quedado en silencio durante una reunión incluso cuando tenías una pregunta o algo importante que aportar? Si te esfuerzas por evitar interactuar con tu equipo, es posible que experimentes ansiedad social. No es inusual que la ansiedad social aparezca en el trabajo en forma de ser demasiado crítico con tus pensamientos y comportamientos, preocupándote demasiado por lo que otros piensan de ti y sintiéndote cohibido. Si tienes dificultades con situaciones sociales o dudas constantes sobre ti mismo, un terapeuta o entrenador puede ayudarte a encontrar estrategias de afrontamiento que funcionen para ti.
- Síndrome impostor. Imagina que tu empresa acaba de alcanzar el estatus de unicornio. Has alcanzado la cima del éxito y, sin embargo, te has convencido de que no lo mereces. No eres lo suficientemente inteligente, no has estado en el negocio el tiempo suficiente. Por alguna razón, simplemente no puedes aceptar que te ganaste el éxito que has logrado. Eso es el síndrome del impostor. Y hay muchas maneras de anular estos pensamientos. Háblate a ti mismo para animarte y recuerda que te has ganado ese lugar.
Cómo lidiar con la ansiedad en el trabajo
Aquí hay algunos consejos para canalizar tu energía ansiosa de maneras más positivas:
- Respira profundamente: esto ayuda a activar tu sistema nervioso parasimpático, lo opuesto a tu sistema nervioso simpático, que es responsable de tu respuesta de lucha, huida o congelación.
- Mueve tu cuerpo: el movimiento estimula la liberación de sustancias químicas que te hacen sentir bien, como la dopamina, la serotonina y la noradrenalina en tu cerebro. Una caminata rápida puede hacer maravillas para aliviar tu ansiedad en el trabajo.
- Adopta una mentalidad activista: cuando te enfrentes a un problema que te provoque ansiedad en el trabajo, pregúntate: «¿De qué maneras diferentes puedo abordar esto?». Saber que tienes al menos una forma de salir de una situación estresante te ayudará a ser más resistente.
- Busca apoyo social: las relaciones afectuosas pueden ayudar a amortiguar el impacto del estrés en el trabajo. Ya sea un cofundador, un mentor o un grupo de apoyo, encuentra personas con las que puedas hablar sobre tus desafíos.
- Encuentra el humor: aunque te tomes tus objetivos en serio, es importante no tomarte la vida demasiado en serio. A veces, la risa puede ser la mejor medicina.
- Practica la atención plena: se ha demostrado que las actividades conscientes como la meditación y el yoga reducen los comportamientos de afrontamiento evitativos, como depender del alcohol o la comida basura para ayudarte en momentos de ansiedad.
