España está posicionándose como un lugar clave para la construcción de centros de datos y su objetivo es consolidarse como el primer hub de interconexión del sur de Europa.
El liderazgo en este campo es esencial para el futuro del país, destaca la multinacional española, ya que “son los habilitadores de las infraestructuras digitales sobre las que se asientan la economía y la sociedad digitales”, explica Tomás Callejo, director de la Unidad de centros de datos en fdata.
Sin ellos, no sería posible realizar transacciones, teletrabajar, realizar operaciones empresariales ni disfrutar de las nuevas formas de entretenimiento, desde las redes sociales a las plataformas digitales de contenidos. Por tanto, subraya el experto, que “de ellos depende el mundo digital en el que nos movemos y su desarrollo tiene altas implicaciones para el progreso”.
El reto: evolucionar los centros de datos para adaptarlos a la era de la IA
El aumento constante de la cantidad de datos que se generan en el mundo y la rápida adopción de la inteligencia artificial exigirá mayores requisitos de potencia informática y, en este contexto, será imprescindible una apuesta por la innovación para aumentar la eficiencia de los data centers en el futuro.
Según Tomás Callejo,“las principales tendencias en 2024 están siendo los diseños modulares, que permiten la escalabilidad que se necesita ante el crecimiento exponencial de los datos; los microcentros de datos, para operar entornos de baja latencia y autonomía local, como aplicaciones en el perímetro, IoT o sucursales, y la sostenibilidad”.
Precisamente uno de los grandes desafíos del entorno de data center es conseguir que sean eficientes. Esta es una de las industrias que más energía consume: en torno a 205TWh, que equivalen al 1% de toda la energía consumida a nivel global. Por eso, hay que enfocar el diseño en cuatro vertientes: eficiencia energética, utilización de energías renovables, ubicación de las instalaciones y gestión responsable de los recursos.“Ya existen diversas fórmulas que ayudan a resolver estas problemáticas como la refrigeración líquida, la combinación de energía eólica y solar para alimentar la instalación e incluso almacenar energía y la ubicación estratégica del centro de datos en lugares con climas más suaves”, añade el responsable de fdata.
Aparte de una gran flexibilidad y escalabilidad que permitan la prestación de servicios avanzados y exigentes, los centros de datos deben ser habilitadores de alta seguridad y fiabilidad, y dar soporte a los grandes modelos de IA (LLM). “Si los centros de datos ya eran el núcleo de la economía digital, hoy afrontamos nuevos retos a los que tenemos que dar respuesta para garantizar el progreso”, concluye Callejo.