1. Actualiza el sistema operativo y las apps
Revisa que tanto el sistema operativo de tu teléfono móvil como las apps que tengas instaladas están actualizadas. Así evitaremos el mal funcionamiento y que los ciberdelincuentes aprovechen los fallos de seguridad de las mismas.
2. Libera espacio y deja solo lo que necesites
Realiza una limpieza y borra los archivos, vídeos o fotos innecesarias para liberar espacio. Aquellos que quieras conservar pero no necesites tener en el móvil, puedes guardarlos en tu ordenador, un dispositivo de almacenamiento externo o en la nube, como se indica en el paso 4.
También es recomendable realizar una limpieza de los archivos temporales y de la caché del sistema y así mejorar el rendimiento del dispositivo.
Igualmente, desinstala las aplicaciones que no utilices para que no te ocupen espacio de forma innecesaria y se libere así la memoria que usan.
En cuanto a los emails, conversaciones de chat, SMS, contactos etc., es recomendable que los revises y elimines aquellos que no sean necesarios para saber la información que tienes almacenada y dónde.
3. Antivirus y análisis
Instala un antivirus para proteger tu móvil, ya que el malware no afecta sólo a los ordenadores. En la sección “Herramientas gratuitas” de la OSI hay disponibles varios antivirus para dispositivos móviles.
4. Copias de seguridad de tu información (contactos, archivos, fotos, vídeos)
Una vez hayas borrado la basura o aquello que ya no necesitas, haz una copia de seguridad de tu móvil Android o iPhone en un medio seguro: contactos, documentos personales, vídeos, fotos u otros archivos importantes para que, en caso de imprevistos (pérdida, infección, fallo o rotura del móvil), puedas recuperarlo de forma rápida y sin sufrir pérdidas de información.
De forma adicional, cifra la información confidencial para que, en caso de pérdida o descuido, nadie pueda tener acceso a ella (incluso los archivos que subas a la nube).
5. Revisión de permisos y privacidad de las apps y servicios que usas
Una vez revisada y hecha la limpieza de apps de tu móvil es conveniente revisar los permisos que están utilizando. Algunas de ellas pueden requerir permisos que no son necesarios para su funcionamiento y que pueden afectar a tu privacidad y seguridad. Por ejemplo, una app con función de linterna no debería acceder a nuestros contactos o cámara. Revísalo, reflexiona sobre ello y actúa en consecuencia.
Si tu dispositivo móvil es Android, puedes instalarte CONAN mobile que te permite conocer el estado de seguridad y privacidad de tu dispositivo.
6. Gestión acceso al móvil, contraseñas en servicios y 2FA (Doble factor autenticación)
Establece un patrón de desbloqueo para usar el teléfono móvil (patrón de dibujo, PIN, Huella digital) y así evitar que terceras personas puedan acceder a tu móvil en caso de descuido, pérdida o robo.
Revisa la seguridad de las cuentas y servicios que utilizas desde tu móvil. Utiliza en cada una de ellas contraseñas robustas y no las reutilices en otros servicios. Establece, en aquellos servicios que utilicen información personal, un doble factor de autenticación para evitar accesos no deseados y problemas de seguridad en caso de pérdida, descuido, robo o filtración de información en internet.
Utiliza un gestor de contraseñas para guardar en un sólo sitio las credenciales de todas tus cuentas y servicios (usuario y contraseña de cada uno).
Utiliza los servicios «Encuentra mi dispositivo» en Android y «Busca mi iPhone» en iOS de Apple, para que en caso de robo o pérdida, puedas borrar los datos e información personal que tengas almacenada en tu teléfono móvil.
7. Revisión de la privacidad y datos bancarios
Revisa la configuración de privacidad y seguridad de tus redes sociales.
Revisa en qué servicios tienes guardados datos de tus tarjetas bancarias y de su seguridad y borra lo que no sea imprescindible. Si realizas compras online desde tu móvil, puedes utilizar una cartera digital para guardar la información de tus tarjetas bancarias y de esta manera, tener en un sólo sitio dicha información y no en diferentes apps o servicios.
8. Conexiones a redes wifi
Si utilizas redes wifi públicas o que tengan un nivel de seguridad deficiente, nunca las uses para conectarte y acceder a servicios que gestionen información personal o financiera. Borra de la memoria de tu móvil las wifi que hayas usado en sitios a los que ya no vas a volver de forma frecuente, pueden ser un agujero de seguridad.
Haz esto de forma periódica y estarás más tranquilo.