Solo necesitas invertir el tiempo suficiente para buscar en profundidad la respuesta correcta.

10 preguntas que te ayudarán a tomar la decisión correcta

©BigStock

Actualizado 29 | 03 | 2021 11:30

Tomar decisiones

Todos hemos sentido alguna vez incertidumbre sobre una decisión, especialmente si esta decisión involucra a más personas o si cambia el curso de nuestro futuro. Muy a menudo, estas decisiones traen consigo algún tipo de miedo: miedo al arrepentimiento, al fracaso o simplemente a lo desconocido.

La buena noticia es que nuestras vidas están llenas de decisiones, pequeñas y grandes, importantes y cotidianas, conscientes e inconscientes.

Recordar que siempre estamos tomando decisiones alivia un poco el miedo y entrena nuestra capacidad para decidir sin paralizarnos. Sin embargo, la mejor manera de tomar decisiones es simplemente preguntando a la persona adecuada: tú mismo.

El objetivo de esta lista de preguntas es que respondas a cada una de ellas por escrito y con sinceridad. Cuando termines, podrás llegar a la mejor conclusión para ti y, al mismo tiempo, entrenar tu capacidad para tomar mejores decisiones en el futuro.

  1. “¿Cuánto tiempo he pensado en esto?” A veces nos vemos atrapados en decisiones que simplemente no son tan importantes. Una forma de filtrar estas decisiones y reducir el estrés que conllevan es evaluando cuánto tiempo hemos pensado en ello.
  2. “Cuando pienso en ese tema, ¿qué siento?” ¿Miedo o angustia? ¿Estrés o ansiedad? No olvides que nuestras decisiones tienen consecuencias fisiológicas y emocionales, por lo que detectar estas sensaciones a tiempo puede ayudarte a saber si estás o no en el camino correcto.
  3. “¿Esta decisión afectará mi vida en cinco años?” Visualiza tu vida de aquí a unos años y piensa si esta decisión cambiará tus planes. Si realmente tiene un impacto en el futuro, es importante que no la tomes a la ligera y evalúes profundamente tus pensamientos y motivos en torno a esta decisión con el resto de las preguntas.
  4. “¿Cómo de comprometido estoy con este cambio?” Las decisiones importantes conducen a cambios importantes, y muchas veces no estamos dispuestos a abordarlos. En esta pregunta, es aconsejable que evalúes tu compromiso en una escala del 1 al 5, siendo el número 5 es el nivel más alto de compromiso.
  5. “¿Qué otras opciones tengo?” Encerrarte en un pensamiento te ciega a otras opciones disponibles a tu alrededor. Solo cuando anotas todas tus posibilidades, puedes visualizar claramente más opciones a tu alcance y decidir mejor. Si encontraste más opciones en este decisivo laberinto, entonces es hora de que sopeses las ventajas y desventajas de cada una de ellas. Es una forma práctica de filtrar solo las opciones que más te convengan y descartar el resto.
  6. “¿Qué es lo peor que puede pasar si no tomo una decisión o si cometo un error?” Esta pregunta te ayuda a enfrentar el miedo. A veces, las cosas no son tan serias como las imaginamos y el peor escenario se vuelve extremadamente irreal; mientras que en otras ocasiones esta pregunta nos ayuda a subir el nivel de importancia y mantener los ojos abiertos para decidir lo mejor posible. Recuerda que el estrés no es nada malo, mantiene tu sistema nervioso «activado» y listo para actuar.
  7. “¿Es este el momento adecuado?” Para responder a esta pregunta, respira y concéntrate en el tiempo presente. Mira a tu alrededor y evalúa tu vida en estos momentos. Si consideras que es el momento adecuado para tomar esta decisión, no te arrepentirás en el futuro. Responde con sinceridad, sobre todo porque, muchas veces, vivimos esperando el momento perfecto para casi todo. Con frecuencia, esperamos que las condiciones sean ideales para dar el primer paso, pero recuerda que el momento perfecto no existe, y que el crecimiento personal comienza cuando no estamos del todo preparados para actuar.
  8. “Si este no es el momento adecuado, ¿cuándo lo será?” Sé objetivo y realista con esta pregunta, trata de responder con un tiempo concreto y un contexto definido. Respuestas como “cuando tenga menos estrés” o “cuando tenga menos responsabilidades” no son las mejores porque el futuro parece muy borroso y solo te confundirás más. En cambio, respuestas como «cuando empiece mi próximo proyecto en 2022» o «cuando consiga ahorrar 20.000 euros» son respuestas que te dan perspectiva y decisión.
  9. “¿Puede ayudarme alguna experiencia pasada?” Deja que tu experiencia te guíe para tomar la mejor decisión y analiza lo siguiente: ¿Has tomado una decisión similar antes? ¿Qué sentiste después de tomar esa decisión? ¿Hay algo que podrías haber hecho de otra manera?
  10. “Después de tomar una decisión, ¿cómo me sentiré?” Sin duda, esta es una de las respuestas más importantes. Tu felicidad, salud y bienestar tienen que ser una prioridad, por lo que si las consecuencias de tu decisión no lo logran, o incluso arrastran resultados negativos para tu vida, será mejor que lo pienses un poco más detenidamente.

Recuerda que la toma de decisiones no es en blanco y negro; solo necesitas invertir el tiempo suficiente para buscar en profundidad la respuesta correcta.

Me interesa

 


Cargando noticia...