Cuando tienes un sitio que ofrece grandes volúmenes de contenido, quieres que tus lectores confíen en ti, te sigan y vuelvan a por más. Al mismo tiempo, deseas desarrollar un sistema para la publicación de contenido que sea rutinario y manejable para ti.
A continuación, te mostramos 10 errores comunes que los creadores de contenido tienden a cometer y algunas formas fáciles de evitarlos.
- Escribir malos titulares: El título de tu publicación es lo primero que la gente va a leer. Los titulares pueden hacer o deshacer tu contenido. Por lo tanto, necesitas titulares que sean inteligentes y atractivos, pero lo más importante es que le den al lector una idea clara de lo que trata tu contenido. Si el lector no puede decir en los cinco segundos posteriores a la lectura del titular de qué trata la publicación, es probable que no haga clic para leer el resto de la publicación. También existen buenas prácticas en lo que respecta al formato de los títulos. Por ejemplo, incluir ciertas palabras y mantener los titulares de cierta longitud puede aumentar tus posibilidades de participación. Hay un montón de herramientas de análisis de titulares disponibles para ayudarte con la construcción de titulares. Por ejemplo, el analizador gratuito CoSchedule es excelente para revisar tu contenido.
- No corregir las faltas de ortografía: Nada aleja más rápido a tu usuarios que una gran cantidad de errores ortográficos y gramaticales. Los errores tipográficos ocurren de vez en cuando, pero si una publicación tiene un error tras otro, ¿cómo puede confiar el usuario en que la información proporcionada sea autorizada o valiosa? Si tienes problemas con la ortografía, la gramática, el uso, la mecánica y la puntuación, podrías considerar contratar a un corrector de estilo independiente para que revise rápidamente tu contenido. En internet también puedes encontrar herramientas de corrección, como Stilus o Spellboy.
- No utilizar ayudas visuales: El texto y el contenido son primordiales, pero las ayudas visuales son lo que llaman la atención del espectador, despiertan su curiosidad y lo guían a través del contenido. Es un hecho: las publicaciones sin imágenes tienen tasas de rebote mucho más altas que las que las incluyen. Las imágenes de archivo son un gran recurso. Si tienes un presupuesto limitado y no puedes pagar una suscripción a un banco de imágenes, tienes algunos sitios gratuitos como Unsplash. Está lleno de buenas imágenes sobre casi todos los temas que puedas imaginar. Además de incorporar imágenes, asegúrate de utilizar ayudas tipográficas como texto en negrita, cursiva, encabezados de diferentes tamaños, listas numeradas, viñetas, enlaces de diferentes colores, etc. Experimenta y encuentra lo que mejor funcione para tu marca y mensaje.
- No acreditar la imágenes: Hablando de usar imágenes, si estás usando imágenes de internet, no olvides acreditarlas. Esto también se aplica a las imágenes de bancos de imágenes gratuitos. Acreditar es fácil; puede ser en forma de un título o al pasar el cursor por encima de la imagen. Incluso puedes vincular la imagen al sitio web o al perfil social del propietario. Acreditar no solo es lo correcto, sino que también aumenta la autoridad y la confiabilidad de tu trabajo.
- Publicar de manera inconsistente: A veces, la creación de contenido queda relegada a un segundo plano. Pero si has hecho una promesa pública a tus lectores de compartir contenido nuevo todos los miércoles y no lo haces durante un período prolongado de tiempo, perderás la credibilidad con tus lectores. Esto es especialmente cierto si tus lectores pagan por tu contenido. La forma más fácil de luchar contra la inconsistencia es establecer objetivos realistas, no idealistas, para compartir contenido cuando estás empezando. Comienza con una publicación a la semana y aumenta lentamente a medida que la creación de contenido se vuelva cada vez menos difícil. Hazte un calendario editorial y pon fechas límite para los borradores en tu calendario.
- Duplicar contenido: ¿Alguna vez has escrito una publicación de invitado particularmente fantástica que has querido compartir en tu propio sitio? Eso es genial. Debes compartirla con tus lectores leales, pero debes hacerlo de tal manera que evites que tu contenido sea marcado como una copia por los motores de búsqueda. Compartir contenido idéntico en varios sitios te hace parecer redundante tanto para tus lectores como para los motores de búsqueda. En lugar de copiar y pegar, puedes reescribir la publicación para decir las mismas cosas con diferentes palabras, o puedes escribir una fantástica introducción en tu sitio y luego vincularla a la pieza original. Puedes reutilizar la imagen para el contenido original, o mejor aún, haz una captura de pantalla de la pieza y úsala. Pero nunca dupliques contenido.
- No utilizar enlaces internos o externos: Al insertar enlaces a lo que estás haciendo referencia en tus artículos, puedes ayudar a dirigir los ojos a exactamente lo que deseas que vean tus lectores. Además, la inserción de enlaces le da al lector la opción de hacer clic y hacer su investigación después de terminar de leer tu artículo. Solo asegúrate de hacer clic en la opción «abrir en una nueva pestaña» cuando agregues enlaces. Así, tu lector no se desviará de tu artículo cuando haga clic en tus enlaces. Igual de importante para vincular externamente es vincular a publicaciones más antiguas dentro de tu blog. ¿Por qué? Porque muestras a los lectores que eres un experto en la industria. Les haces querer volver y explorar tus publicaciones más antiguas y los animas a volver en el futuro. La vinculación es una excelente manera de demostrarles a tus lectores que vale la pena suscribirse.
- Centrarte solo en los números: El seguimiento de tus estadísticas es importante, pero no es el fin de la creación de contenido. Debes comprobarlas varias veces a la semana para ver cuántas visualizaciones recibe tu contenido, de dónde proceden esos clics, y quién hace clic y hacia dónde. El contenido orgánico necesita tiempo para ganar terreno. Verificar obsesivamente tus métricas al principio puede ser engañosamente desalentador. Y el desánimo podría impedirte crear el nuevo contenido que necesitas para tener éxito.
- No utilizar medios digitales: Es posible que estés compartiendo contenido todos los días o todas las semanas, pero ¿estás llegando a tu nivel? Si no estás enviando tus publicaciones a tu lista de correo y no estás publicando enlaces a tu Twitter y Facebook, no estás maximizando tu alcance. Obviamente, las técnicas de marketing digital funcionan mejor para contenido público o gratuito, pero eso no significa que tu contenido privado solo para miembros no pueda reutilizarse de alguna manera para los medios digitales. Reutiliza contenido antiguo exclusivo para miembros en un boletín de noticias.
- No responder a los comentarios: ¿Tu última y mejor publicación recibió una avalancha de comentarios? ¿Respondiste a todos ellos? Si no lo has hecho, ¡deberías! Cuando las personas te hacen saber que les encanta algo de tu contenido, debes interactuar con ellos. Cuando las personas te hacen una pregunta en referencia a algo que escribiste, debes responderles. Interactuar con tus lectores hace que se sientan reconocidos, apreciados y conectados contigo y tu marca. Reserva un poco de tiempo cada semana para responder a tu base de seguidores y recordarles que eres una persona real detrás de la pantalla que lees y aprecias sus comentarios.
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