¿Alguna vez te has preguntado que es lo que hace efectiva a una empresa? En la administración de empresas existen varios modelos que facilitan la mejora de los procesos; hoy vamos a hablar de la gestión de la calidad total, el secreto detrás del éxito de muchas empresas japonesas.
Concepto de gestión de la calidad total
En pocas palabras, lo que busca la gestión de la calidad total es lograr la mayor eficacia y flexibilidad en todos los procesos de la empresa a fin de alcanzar sus objetivos a corto y medio plazo.
Uno de sus elementos clave es la orientación al cliente, siempre en busca de su mayor satisfacción; al fin y al cabo, es él quien tiene el poder de decidir qué es un servicio o producto de calidad. También se busca mejorar la satisfacción de los trabajadores, todo ello sobre la base de la mejora continua.
Este concepto fue introducido por el economista estadounidense Edwards Deming, pero sus ideas no tuvieron demasiado éxito en su propio país. Sin embargo Japón, que por entonces acababa de ser devastado en la II Guerra Mundial, estaba a la búsqueda de modelos que le permitieran reconstruir la economía del país. Por ello, se lanzaron a aplicar las teorías de Deming con gran éxito, hasta el punto de que todavía hoy celebran el premio anual Edwards Deming a la calidad empresarial.
Aspectos fundamentales de la gestión de la calidad total según Deming
Sobre la base de la mejora continua, Deming propone una serie de aspectos a desarrollar para alcanzar una buena gestión de calidad total:
- Mejora continua de los procesos de la organización, tanto en los productos y servicios como en el desempeño de los trabajadores.
- Implicación de la alta dirección en la mejora de la calidad y la productividad, promoviendo entre los trabajadores los conceptos y principios necesarios para ello.
- Formación continua de los trabajadores a fin de mejorar su capacitación y adaptarse a los cambios. Se ha de buscar favorecer los métodos de trabajo, recursos y entrenamiento necesarios para mejorar la productividad.
- Programa de motivación de los trabajadores a fin de estimular prácticas de lifelong learning.
- Mejoramiento constante de los productos y servicios. Aplicar los más altos estándares de calidad en todo momento, sin permitir errores considerados como “normales” en temas como pérdidas de tiempo, productos defectuosos, retrasos y pérdidas de tiempo o materias primas de calidad subóptima.
- Superación continua en lo referente a calidad y productividad.
- Aplicar pruebas de calidad basadas en métodos estadísticos, en lugar de depender de inspecciones masivas. El objetivo debe ser ayudar al personal a desempeñar mejor su labor.
- Eliminar las barreras de todo tipo entre las áreas y las personas de la organización, a fin de facilitar una comunicación bilateral en todos los niveles. Esta comunicación debe favorecer el trabajo en equipo y la cooperación para alcanzar los objetivos comunes de la empresa.
- Inspirar en los trabajadores el sentimiento de y lealtad a la empresa, así como el orgullo acerca de sus logros y habilidades personales.
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