El ECOFIN ha mostrado su insatisfacción por el hecho de que el G-20 no pudiese aprobar este sábado en el encuentro de Baden-Baden (Alemania) una declaración de apoyo a un sistema de comercio global por la oposición de Estados Unidos.
Los responsables de Economía de los gobiernos de la UE han abordado este martes los resultados de la reunión de ministros de Finanzas y presidentes de bancos centrales del G-20. En una conferencia de prensa, el ministro maltés, Edward Scicluna, que este semestre ostenta la presidencia de turno de la UE, ha reconocido que el comunicado final «es menos de lo que habríamos deseado».
En concreto, el documento final hace una mera referencia simbólica a la necesidad de fortalecer la contribución del comercio a la economía, con lo que se pone fin a una década de rechazo sin fisuras al proteccionismo.
El propio ministro de Finanzas maltés había afirmado a su llegada al Ecofin que la «atmósfera» en la reunión del G-20 fue «muy positiva» pero «surrealista» porque el objetivo de esta formación es «buscar la cooperación entre todos».
Por otro lado, el ministro de Finanzas belga, Johan Van Overtveldt ha reconocido su «preocupación» por los efectos que puede tener el enfoque del G-20, ya que «todas las economías europeas son economías abiertas» y están «orientadas hacia un sistema de comercio internacional abierto».
También se ha pronunciado el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Pierre Moscovici, quien ha señalado que la reunión en Baden-Baden fue un encuentro «interesante» en el que se comenzó a discutir con la nueva Administración estadounidense y en el que la Comisión Europea recordó su compromiso con el multilateralismo y con la lucha contra el cambio climático.
«El comunicado no refleja todas estas prioridades pero no es un retroceso», ha remarcado en todo caso el socialdemócrata francés.
IVA REDUCIDO PARA LIBROS ELECTRÓNICOS
Por otro lado, los ministros de Finanzas de la UE han avanzado en la propuesta del Ejecutivo comunitario para permitir a los Estados miembro aplicar un tipo de IVA reducido para las publicaciones electrónicas, una posibilidad que en la actualidad no permite la legislación europea, que obliga a aplicar como mínimo un IVA del 15%.
Scicluna ha explicado sobre esta cuestión que algunos países han mostrado sus reservas por la posibilidad de que esto abra la puerta a la aplicación de tipos de IVA súper reducidos o cero.
Otro asunto que ha tratado el Ecofin es la propuesta de Bruselas para permitir la llamada «inversión del sujeto pasivo» del IVA para ciertas operaciones transfronterizas entre empresas con un valor superior a los 10.000 euros, aunque tampoco alcanzaron un acuerdo.