La Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (Asedas) ha señalado que la sostenibilidad medioambiental, social y económica serán claves e imprescindibles para el desarrollo en el futuro del canal ‘online’ en alimentación, según los datos que se desprenden del II Estudio sobre la evolución del Comercio ‘online’ en Alimentación en España.
«El reto de las compañías para vender ‘online’ en el futuro será la búsqueda de sostenibilidad y la rentabilidad del negocio. El desarrollo del comercio por Internet es compatible en el futuro con el comercio de proximidad y no vemos que se pueda sustituir uno por otro», ha asegurado el director general de Asedas, Ignacio García Magarzo, durante la presentación del informe.
De esta forma, García Magarzo ha avanzado que para hacer compatible el comercio de alimentación ‘online’ se precisa una triple sostenibilidad: la económica, social y la medioambiental.
Así, ha destacado que el informe muestra que el consumidor no relaciona ‘motu proprio’ el comercio ‘online’ (transporte, emisiones, envases adicionales, etc.) con el medio ambiente.
Según este análisis, en el futuro, uno de los retos del comercio alimentario es hacer compatible la reducción de emisiones de CO2 con el crecimiento del reparto a domicilio de alimentación, abordando el impacto urbanístico en la ciudad, para lo que es necesario asegurar una «movilidad y un formato sostenible», gracias a una logística eficiente.
En esta línea, el ‘ecommerce’ encara la necesidad de mantener el trinomio precio-calidad-variedad en la oferta de alimentación, para lo que es necesario que el coste del reparto no repercuta en un sobrecoste de los precios y en la competitividad de las enseñas.
«Este objetivo debemos conseguirlo abordando desde la responsabilidad las cuestiones relacionadas con la movilidad y el coste para que los españoles sigan disfrutando de una alimentación a precios competitivos, variada y de calidad», ha subrayado García Magarzo.
LOS FRESCOS RALENTIZAN EL CRECIMIENTO DEL ‘ONLINE’
De esta forma, el informe muestra que el 80% de los encuestados hace la compra ‘online’ en su lugar de trabajo de lunes a viernes, normalmente en horario de mañana o mediodía, en el caso del 37%, ya que «sacrifica momentos de descanso» de su vida laboral, según ha señalado la profesora Doctora de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la UCM y directora del estudio, María Puelles.
Puelles ha destacado que el 75% de los consumidores ‘online’ hacen su compra desde el ordenador, aunque ha recalcado que avanza el uso de dispositivos móviles, sobre todo de los ‘smartphones’ (8%).
El estudio constata también que los consumidores se resisten todavía a la adquisición por Internet de alimentos frescos. Así, el 60% de los encuestados solo compra este tipo de productos en tiendas físicas, si bien cerca del total restante lo hace en ambos canales, mientras que los productos que crecen son los envasados y los de limpieza personal y de hogar.
De esta forma, el perfil del consumidor ‘online’ es de 30 y 50 años, que tiene acceso a la tecnología, y se trata de una mujer, con educación de grado universitario, y que tiene unos ingresos entre 1.000 a 3.000 euros.
El comprador dedica una media de entre 15 y 30 minutos a la realización de su compra ‘online’ de alimentación, mientras que en el establecimiento físico se dedica de 20 a 45 minutos, por lo que al hacerla a través de Internet se ahorra tiempo, una de las razones para hacer la compra ‘online’.
La directora del estudio ha subrayado que el elemento de conveniencia se consolida como el que mayor uso del canal ‘online’ se hace cuando se precisa la reposición de productos de gran peso y volumen, mientras que ha destacado que cuando se dan condiciones climatológicas adversas, como días muy fríos, muy calurosos o lluviosos también se intensifica su uso, frente al menor uso del ‘online’ que se hace en el periodo vacacional.