La Seguridad Social registró un superávit de 3.237,3 millones de euros en los cuatro primeros meses del año tras recaudar por cotizaciones sociales 37.789,2 millones de euros, un 5,5% más que en igual periodo de 2017 y su mejor resultado desde 2008.
Este incremento de las cotizaciones se debe al crecimiento de las cuotas de los ocupados en un 5,8% interanual, y al de las abonadas por los desempleados en un 1,4%, según ha informado este martes el Ministerio de Empleo.
El saldo positivo registrado por la Seguridad Social hasta abril es resultado de unos ingresos no financieros de 45.082,17 millones de euros, frente a unos gastos de 41.844,9 millones de euros.
Del volumen total de derechos reconocidos, el 91,18% corresponde a las entidades gestoras y servicios comunes de la Seguridad Social y el 8,8% restante a las mutuas colaboradoras con la Seguridad Social. En cuanto a las obligaciones, el 94,26% han sido reconocidas por las entidades gestoras y el 5,74% por las mutuas.
La recaudación neta de cuotas avanzó hasta abril a una tasa anual del 5,8%, frente al crecimiento del 3,4% de los pagos realizados en pensiones.
Por otro lado, las transferencias corrientes totalizaron 6.841 millones de euros en los cuatro primeros meses, un 7,7% menos que las acumuladas a la misma fecha de 2017.
Los ingresos patrimoniales, por su parte, ascendieron a 36,8 millones de euros, con una disminución interanual del 80,3%, mientras que las tasas y otros ingresos alcanzaron los 403,2 millones de euros, un 5,8% menos.
EL 94,9% DEL GASTO, DESTINADO A PRESTACIONES
Según Empleo, las prestaciones económicas a familias e instituciones sumaron 39.699,8 millones de euros, cantidad un 3,3% superior a la del mismo periodo de 2017 y que representa el 94,9% del gasto total realizado por el sistema hasta abril.
Dentro de las prestaciones contributivas, las pensiones (invalidez, jubilación, viudedad, orfandad y a favor de familiares) alcanzaron un importe de 34.013,4 millones de euros, cifra un 3,4% superior a la de un año antes.
Las prestaciones por maternidad, paternidad y riesgo durante el embarazo supusieron 736,3 millones de euros, un 2,6% más que en los cuatro primeros meses del año pasado, mientras que el gasto en incapacidad temporal se elevó a 1.541,4 millones de euros, un 13,6% más que en igual periodo de 2017.
Por último, las prestaciones y pensiones no contributivas, incluidos los complementos a mínimos, que corren a cargo de los presupuestos del Estado, ascendieron a 3.279,1 millones de euros (-1,2%), de los que 2.658,2 millones de euros fueron para pensiones no contributivas y complementos a mínimos y 620,9 millones para subsidios y otras prestaciones.
Empleo ha destacado que el 24,9% del total de las pensiones requieren complemento a mínimos.
