La actividad económica de la eurozona se ha visto impulsada gracias a la buena marcha del sector manufacturero, ante una expansión más débil del sector servicios, según el índice PMI elaborado por IHS Markit.
En concreto, el Índice PMI Compuesto de la actividad total de la zona euro se situó una décima por encima que el dato del mes precedente, en 55,8, no obstante, aunque el ritmo de expansión es similar al del mes inmediatamente anterior, el sector manufacturero llevó a este índice general a alcanzar un máximo de dos meses.
El índice muestra un «intenso» crecimiento de la actividad del sector privado de la zona euro y la tasa de expansión continúa manteniéndose en la más alta observada de los seis últimos años.
Así, el índice del sector manufacturero, que avanzó hasta el 57,4 en agosto, frente al 56,5 de julio y el de producción del mismo sector, que avanzó hasta el 58,1 (56,5 anterior), presentaron unos «sólidos» resultados, debido a aumentos en la producción y en la generación de nuevos pedidos.
Esta última variable se vio reforzada gracias a la mejora de las exportaciones, que registraron el mejor comportamiento de los últimos seis años y medio.
Al contrario, el sector servicios mostró su peor desempeño de los últimos siete meses al retroceder hasta el 54,9 en agosto, desde el 55,4 que marcó en julio.
«Las últimas lecturas del índice PMI para la zona euro señalan la continuación de los recientes resultados de la economía de la divisa única», señaló el director asociado de IHS Markit, Andrew Harker.
En este sentido, el directivo explicó que el fortalecimiento de las carteras de pedidos en el sector manufacturero «es un buen indicio para el mercado laboral, puesto que es probable que las firmas busquen contratar personal adicional para ocuparse de los trabajos pendientes».
Respecto a las dos principales economías de la zona euro, Alemania y Francia, los datos muestran que ambas siguieron mostrando un «robusto» crecimiento de la actividad total en agosto.
Concretamente, Alemania registró un crecimiento más rápido que en julio, hasta el 55,7, frente al 54,7 anterior, mientras que Francia se mantuvo sin cambios en 55,6, si bien, su producción manufacturera aumentó al ritmo más alto desde abril de 2011.