El acoso cibernético es un problema mundial que se ve agravado al ritmo que crecen los dispositivos inteligentes y wearables.
Es una tendencia preocupante en el ámbito físico por las amenazas que supone el uso de estos dispositivos para fines para los que no han sido creados, y también por la instalación de software para vigilancia o espionaje.
¿Sabías que los localizadores llevan tiempo en el mercado?
Hace tiempo que existen dispositivos con funciones similares a las de los AirTags, que permiten a los usuarios localizar objetos a distancia y han sido utilizados para fines tanto legales como ilegales. Por ejemplo, se sabe que varios rastreadores de mascotas podían usarse para acechar a personas si se introducían en el bolso o en el coche de la víctima. Sin embargo, los AirTags son mucho más populares que otros gadgets, ya que pueden utilizarse con millones de iPhone en todo el mundo.
Un iPhone puede notificar el intento de rastreo no deseado de un AirTag, mientras que para los usuarios de Android existen aplicaciones como Apple TrackerDetect que permiten protegerse para no ser localizados. Sin embargo, hay formas de ciberacoso que pueden pasar desapercibidas y que se producen con dispositivos diferentes a los localizadores. Veamos cuáles son y cómo protegerse.
¿Qué otras amenazas en torno a los dispositivos inteligentes debemos tener en cuenta?
Distintos gadgets de tipo inteligente o IoT (Internet de las Cosas) como cámaras, luces o robots aspiradores pueden ser la puerta de entrada para que los ciberdelincuentes accedan a redes internas o se conviertan en herramientas para espiar y rastrear todo lo que hace la víctima. Los análisis de Kaspersky han encontrado diversos vectores de ataque, como la vigilancia o espionaje en remoto y la suplantación de fotogramas de vídeo. Esto permite sustituir las imágenes de la cámara por otras completamente diferentes, lo que hace que los asaltantes de una vivienda puedan pasar desapercibidos.
Cómo protegerse
En cuanto a las amenazas más comunes en torno a wearables como relojes o auriculares, desde Kaspersky recuerdan una serie de principios básicos de seguridad:
- Comprar electrodomésticos de segunda mano no es una práctica segura. Su firmware podría haber sido modificado por sus anteriores propietarios para dar a un atacante en remoto el control sobre un hogar inteligente.
- Un hábito interesante es leer los análisis de seguridad de los dispositivos que se van a adquirir. Los fabricantes generalmente reaccionan ante las vulnerabilidades descubiertas. Siempre es una buena señal que resuelven rápido estos problemas.
- Es recomendable descargar únicamente aplicaciones de tiendas oficiales como App Store, Google Play o Amazon Appstore para evitar posibles amenazas. Las apps de estos sitios no son 100% seguras, pero son revisadas por los propietarios de las tiendas y existen sistemas de filtrado: no todas las aplicaciones pueden entrar en estos markets.
- Una buena práctica es utilizar una solución de seguridad fiable. Pueden detectar stalkerware y poner sobre aviso a los usuarios de cualquier actividad sospechosa iniciada por las aplicaciones, como intentos de acceso a la ubicación, los mensajes o las redes sociales.