Con la creciente demanda del Internet de las Cosas y los dispositivos conectados, es esencial entender los riesgos que llevan asociados, así como saber protegerse de estos. Según un informe elaborado por Kaspersky, al 69% de los usuarios españoles le preocupa que los ciberdelincuentes puedan acceder a la red WiFi doméstica y ser espiados a través de las cámaras de sus dispositivos (ordenadores, tablets, móviles…) o aquellas destinadas a monitorizar estancias.
“Cada vez son más las personas que utilizan este tipo de aparatos sin ser conscientes de las brechas de seguridad y privacidad que pueden llegar a generar, invadiendo tanto la privacidad personal como la del hogar. Es muy importantetomar medidas y estar informados para poder disfrutar de las ventajas de la tecnología conectada, manteniendo un entorno seguro para todos”, destaca Marc Rivero, Lead Security Researcher de Kaspersky.
Para garantizar la seguridad y protección de los dispositivos y juguetes inteligentes, los expertos recomiendan:
- Evalúa el estado de seguridad del dispositivo IoT antes de su compra e instalación en el hogar, comprobando el prestigio de la marca en términos de seguridad y privacidad. Debes dar preferencia a los que tengan certificados de ciberseguridad y a los productos de fabricantes seguros y evitar comprar de segunda mano.
- Actualiza periódicamente el firmware y el software de los dispositivos, incluidos delos que menos esperes que puedan ser hackeados, como, por ejemplo, aspiradores, bombillas o neveras inteligentes. Estas actualizaciones contienen parches de seguridad que protegen a los equipos. Por ello, es importante que te mantengas informado acerca de las novedades y actualizaciones de los dispositivos que se utilizan, y actualizarlos siempre que sea posible.
- Cambia la contraseña que viene por defecto en los dispositivos IoT del hogar. Crea una contraseña segura y cámbiala regularmente.
- Utiliza una solución de seguridad reconocida que contribuya de forma eficaz a proteger el ecosistema inteligente de los hogares.
- No compartas los números de serie de los equipos, las direcciones IP y, en general, la información sensible. No se deben compartir en redes sociales los dispositivos que usamos en el hogar.
