El comportamiento del mercado laboral en el mes de mayo recoge el inicio de la desescalada, con la salida de los ERTE de más de 450.000 trabajadores.
Sin embargo, hay que ser muy prudentes porque la desescalada no ha hecho más que empezar y a finales de mayo había todavía 760.000 afiliados a la Seguridad Social menos que antes de la declaración del estado de alarma.
Además, todavía quedan tres millones de trabajadores en ERTE al cierre del mes cuya reincorporación al mercado laboral está pendiente de la evolución de la situación económica como consecuencia de la pandemia.
La gradual reactivación de los sectores está incidiendo en las tasas de variación de la afiliación y del paro registrado, que recuperan en cierta medida el margen perdido desde el comienzo de la crisis, pero sin que la actividad esté aportando la intensidad suficiente como para volver al dinamismo de los registros de empleo del periodo precrisis. En este sentido, habrá que analizar la evolución en los próximos meses del aproximadamente 16% de afiliación que se encuentra actualmente bajo un ERTE (unos tres millones de trabajadores), así como la forma en que esta situación afecta a la actividad empresarial, especialmente de las pymes,en los sectores más desfavorecidos En abril, el número de empresas inscritas en la Seguridad Social fue de 1.355.976 empresas, lo que supone 159.745 empresas menos que en el mismo mes de 2019, concentrándose estos efectos entre las empresas de menor tamaño.
Los datos de mayo de los registros de afiliación y desempleo muestran una atenuación del impacto inicial de la crisis del Covid-19 sobre el mercado de trabajo. En términos de afiliación se han generado más de 95.000 afiliados, crecimiento que se encuentra en línea con el promedio del registro en periodos de crisis. El dato desestacionalizado refleja una pérdida de casi 90.000 afiliados, cuantía algo superior a las previsiones estimadas.
En los últimos 12 meses, la Seguridad Social ha perdido 885.985 afiliados (-4,56%).De esta cifra, 776.083 corresponden al Régimen General, que experimenta un descenso del 5,21%. El Régimen Especial de Trabajadores Autónomos, por su parte, registra 56.948 personas menos (-1,74%) en comparación con mayo de 2019.Además, el Sistema Especial Agrario ha registrado una caída de la afiliación de 17.092 afiliados y el Sistema Especial de Empleados Hogar registra 32.189 afiliados menos. El ritmo de caída interanual se intensifica desde el -4,01% registrado en abril al -4,56% registrado en mayo.
Por su parte, el paro registrado mantiene una peor evolución durante el mes de mayo, con un incremento de 26.573 parados más con respecto al mes de abril, con un ritmo de crecimiento mensual que se ralentiza hasta el 0,69 %, y sitúa la cifra total de desempleados en 3.857.776 personas. En términos desestacionalizados el incremento del paro se cifra en 122.458, variación que es prácticamente la mitad a la registrada durante el periodo marzo-abril. En términos interanuales, se registró un incremento de 778.285 personas, lo que supone un 25,27% más que en el mismo mes del año anterior.
Por sectores, el paro registrado respecto a abril desciende en la construcción, en 23.717 personas (-6,89%) y en la industria con 262 personas paradas menos (-0,08%), mientras que se incrementa, sobre todo, en el sector servicios con 40.784 demandantes más (1,50%).
Del total de afiliados, 2.998.970 personas estaban afectados por un ERTE a 29 de mayo. De estos, 2.616.553 personas estaban en situación de ERTE por fuerza mayor. Desde finales de abril, 457.909 personas han dejado de estar en situación de ERTE por fuerza mayor, mientras que los afectados por ERTE no de fuerza mayor se han incremento en 70.094 personas. En media del mes de mayo, hay 2.812.849 personas protegidas por un ERTE de fuerza mayor, lo que supone 504.383 personas más que en abril. Mientras, los ERTE totales afectaban a 3.181.837 personas en media del mes de mayo. Estos datos muestran que a finales de mayo sí se aprecia una cierta recuperación de la actividad. En este sentido, hay que destacar el papel de los ERTE en el proceso de desescalada.
