Hay una serie de factores con respecto a por qué los empresarios no invierten en su sitio web. De lo que quizás no se den cuenta es de que corren algunos riesgos al hacerlo.
Estas son algunas de las razones por las cuales los empresarios pueden escatimar invertir en su sitio web y lo que se puede hacer para contrarrestarlo:
Lo barato al final sale caro: hay un punto en el que se debe reconocer que los servicios excesivamente baratos pueden no proporcionar el nivel de soporte y confiabilidad requerido para realizar el trabajo, pasando a convertirse en un riesgo real que se corre. Ya sea que se trate de un complemento, un servicio de alojamiento u otra cosa, hacerlo basándonos únicamente en el costo generalmente finalmente sale más caro.
El dilema del experto: puede parecer que el proceso de pagar un asesoramiento sobre software y servicios es demasiado o que se puede ahorrar, pero es bueno tener a alguien experto que haga recomendaciones en la esfera de la llamada transformación Digital, que ayude a hacer las cosas de la manera correcta y a proporcionar el mejor resultado para todos los involucrados.
Aprender a pensar como en otro tipo de negocios: la expectativa de que el software y los servicios que ayudan a que un sitio web funcione sean gratuitos (o increíblemente baratos) es algo único en el mundo de los negocios. Es poco probable ver el mismo tipo de expectativas cuando hablamos de edificios, vehículos o incluso computadoras. La mayoría de los dueños de negocios se dan cuenta de que esos artículos tienen un costo asociado. Para algunos, la idea de que todo lo relacionado con la web es de bajo costo aún resuena y, mientras que están dispuestos a pagar por un producto físico, en cambio, son reticentes a hacerlo por un mejor alojamiento o diseño de su web. Por lo que el objetivo es llegar a la conclusión de que un sitio web adecuado es igual de importante (si no más) que las otras partes de un negocio.
Percepción de las ventajas: una vez que se percibe el sitio web como una inversión crucial para el propio éxito, esta mentalidad y su mantenimiento vienen ligadas a las expectativas de metas que se pueden alcanzar a través de estos medios. Por lo que romper el círculo de lo barato o gratis y entrar en el de la inversión en la web es una cuestión de abrirse y proporcionar más de lo que es rentable. Es decir, para que el empresario invierta en su portal o página web tiene que ver el valor real de lo que se puede conseguir a través de estas herramientas, como la demostración que sus productos o servicios los percibe (y compra) mejor la clientela a través de estos medios.
