¿Alguna vez has escuchado el concepto de regla 80/20 o principio de Pareto? Es una teoría que se aplica a diferentes ámbitos, tanto de la vida cotidiana como de la profesional, y de la que te vamos a hablar hoy para que puedas sacar el máximo partido de ella.
El principio de Pareto
Este autor fue un sociólogo muy reputado en el siglo pasado que ya por aquel entonces creó una regla que, aunque pudo pasar desapercibida, hoy está resurgiendo y aplicando a diferentes ámbitos. La regla del 80 20 de Pareto se basa en la consideración de que la gente y su entorno, habilidades o recursos se dividen en dos grupos. Así, el autor cree que el 80% de la población dispone de un 20% de algo y un 20% de un 80%. Para que lo entiendas mejor, podemos ponerte un ejemplo.
En cuestiones de poder adquisitivo, por ejemplo, siempre se habla de que el 80% de la población posee el 20% de los recursos y que el 20% restante posee el 80%.
Sin embargo, esto no solo es aplicable al ámbito económico o sociológico. De hecho, hoy vamos a hablarte de algunas disciplinas empresariales donde la regla 80 20 puede regir para mejorar los beneficios.
El principio dice que el 20% de una acción producirá el 80% de los efectos, mientras que el 80% restante sólo origina el 20% de los efectos
La regla 80 20 en la empresa
- Productividad: Para mejorar los beneficios que un trabajador aporta a una empresa o para que tú, como empleado, puedas conseguir los mejores resultados, también se puede aplicar la regla 80 20. De hecho, si dedicamos el 20% de nuestro tiempo a realizar al menos un 80% de las tareas conseguiremos muchos más beneficios y una mayor posibilidad de conciliación.
- Ventas: Esta teoría también es aplicable al ámbito de las ventas. En marketing, analizar los resultados es crucial para diseñar estrategias efectivas. Por eso, si lo haces, descubrirás que la gran mayoría de las ventas provienen de un pequeño grupo de consumidores. Si es así, ¿por qué no centrarse en la satisfacción de estos clientes? Como ves, la regla del 80 20 también te ayuda en la planificación de la promoción. Además, también es cierto que la gran mayoría de las ventas de un negocio se centran en un pequeño porcentaje de los productos, que es importante identificar y sobre los que podemos incidir para mejorar su interés.
De 100 invitados a una reunión sólo 20 asisten, es decir el 20% de los invitados escuchan el plan, pero de esos 20 sólo el 20% hace el negocio, es decir 4.
La regla 80 20 fue formulada hace casi 100 años, pero sigue vigente en la actualidad e incluso está renaciendo con fuerza. Es aplicable a casi todos los ámbitos de la vida, no solo en el empresarial, sino en el personal o en la docencia, con múltiples aplicaciones según cada caso. Ahora que sabes cómo aplicarlo piensa en el tiempo, esfuerzos y dinero que una empresa podría ahorrar si centra su atención en el pequeño foco de actividad e interés que genera en sus consumidores o lo productivo que sería el trabajo de los empleados si dedicasen un pequeño espacio de tiempo a realizar los principales objetivos propuestos.
De hecho, existen numerosos estudios que relacionan las diferentes ciencias empresariales con el principio de Pareto, a los que te puedes remitir para poder aplicarlos de forma más concreta.