El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha afirmado que España afronta la «mejor oportunidad de crecimiento económico de su historia», y ha pedido el apoyo a los objetivos de estabilidad y deuda para 2018-2020 como una «ventana abierta a la confianza, a la esperanza y para que al término de tres años se haya acabado con la crisis económica».
El rechazo a estos objetivos supone dar la espalda a la recuperación económica y quedarse «al margen de lo que está siendo el final del túnel de la crisis», ha afirmado.
Así lo ha señalado durante su intervención en el Pleno del Congreso de los Diputados durante el debate del acuerdo sobre los objetivos de estabilidad presupuestaria y deuda pública para el periodo 2018-2020 y el límite de gasto no financiero, conocido como techo de gasto, que contarán con el apoyo de PP, Ciudadanos, PNV, UPN, Foro Asturias, Coalición Canarias y la abstención de Nueva Canarias.
Montoro ha asegurado que los objetivos y el techo de gasto muestran el «mejor escenario económico que ha tenido nunca la economía y la sociedad española ante sí», y ha defendido que se trata de unos objetivos que son «objetivamente mejores» que los del año pasado y traen novedades que van a mejorar vida de personas con rentas más bajas.
El Ejecutivo ha fijado en 119.834 millones de euros el límite de gasto no financiero del Estado para 2018, paso previo a la elaboración de las cuentas públicas de 2018, lo que supone un aumento del 1,3% respecto a las cuentas públicas de este año y el primer alza en los últimos cuatro años al elevarse el nivel de gasto en 1.497 millones de euros respecto a este año.
En este sentido, ha apelado a la «responsabilidad» de los grupos políticos para coadyuvar a la consecución del objetivo de la salida de la crisis, ya que los que voten en sentido contrario quedarán «al margen de lo que está siendo el final del túnel de la crisis y de la esperanza de los españoles de que esta crisis y su peor legado se superen de una vez».
«Algo ha pasado en la política española que hace que ese apoyo del PSOE no sea posible», ha lamentado Montoro en referencia a la vuelta de Pedro Sánchez a la Secretaría General del PSOE, al tiempo que ha criticado que algunas formaciones voten en contra del acuerdo de estabilidad presupuestaria porque lo que quieren es «que otros arreglen la crisis para luego venir ellos y hacer lo mismo que hicieron en el pasado, que es volver a llevar a España a la peor de las crisis».
Además, ha afeado al PSOE que respaldase los mismos objetivos en diciembre del año pasado y ahora los rechace. Mientras, ha mostrado el «mayor reconocimiento» del Gobierno a los grupos que han mostrado predisposición al diálogo y su apoyo al techo de gasto.
A estos grupos les ha agradecido su «determinación, generosidad, visión de Estado y lealtad y compromiso con la estabilidad», sin la que ha asegurado que no sería posible la estabilidad política actual que está posibilitando ayudar a «cientos de miles de personas a conseguir trabajo».
A este respecto, Montoro ha recordado que hace cinco años «el suelo se hundía bajo nuestros pies», mientras que ahora España alcanzará en 2020 los 20 millones de ocupados, con lo que se hará «sostenible al sistema de pensiones», ya que el empleo «permitirá que se corrija» el déficit público y «acelerará la reducción de la deuda pública».
Según Montoro, el crecimiento «creador de empleo y compatible con el superávit de la balanza de pagos» ha sido posible gracias a las reformas estructurales implementadas en los últimos años, como la laboral, la del sector bancario, energético, educación o administraciones públicas, y para 2020 se reducirá la deuda pública en siete puntos del PIB, unos 70.000 millones de euros que supondrán un «nuevo impulso» y facilitarán la recuperación económica.
En todo caso, ha apuntado que el techo de gasto acerca a los PGE de 2018, que serán unas cuentas nuevas pero que «confirman la política presupuestaria que nos está empujando hacia adelante, a superar la crisis y con una formidable creación de empleo».
El titular de Hacienda ha explicado que el techo de gasto irá destinado en su gran mayoría a financiar las clases pasivas, los derechos de los funcionarios en su retiro y la subida de los salarios de los empleados públicos que se empezará a negociar para el año que viene.
En esta línea, ha avanzado que las cuentas públicas de 2018 van a facilitar el escenario de crecimiento económico y creación de empleo.
