El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, ha reivindicado la importancia del emprendimiento en el campo de la tecnología como muestra de la buena salud de una sociedad.
Nadal ha destacado la mejora «sustancial» que está registrando España en este campo.
En declaraciones a los medios tras visitar la feria para emprendedores digitales 4 Years from Now (4YFN), Nadal ha afirmado que una sociedad en la que haya cada vez más gente dedicada a esto y con vocación para tener éxito personal y que aporte la creación de empresas tecnológicas es «una sociedad que va bien».
En este sentido, ha remarcado que una sociedad cuyo sueño sea crear una compañía de este estilo con unas ideas que nadie ha tenido anteriormente y apasionarse por este mundo convertiría a España en uno de los grandes países en el marcado tecnológico a nivel mundial.
A este respecto, ha asegurado que España está mejorando «sustancialmente» en este campo y cuenta con «un sector muy sólido y cada vez más consolidado». «Es la gran revolución del siglo XXI y las personas que se dedican a ello nos harán participar en esta revolución», ha agregado.
En este contexto, Nadal ha reivindicado el 4YFN como un evento que adelanta cómo funciona el motor de la tecnología que está mostrando que existe un «cambio de incentivos», ya que en la actualidad hay mucha gente que orienta su desarrollo profesional hacia el emprendimiento en empresas tecnológicas.
Así, ha remarcado que esto supone «un reto personal y un modo de vida», ya que supone ser capaz de superar barreras que otros antes no han superado. De hecho, ha añadido que lo que más satisfacción produce a los emprendedores es cuando se logra el objetivo profesional marcado.
El ministro también ha aprovechado su visita al Mobile World Congress (MWC) de Barcelona para mantener un encuentro con el vicepresidente de la Comisión Europea y Comisario Europeo de Mercado Único Digital, Andrus Ansip, y otro con el ministro de Tecnologías de la Información y Comunicaciones de Colombia, David Luna, aprovechando el «marco incomprable» que supone la feria para estas actividades.
