Para el comercio a pie de calle los hurtos y pequeños robos son un problema que suponen pérdidas por valor de un 1,3% de su facturación anual. Según un informe de la Asociación de Empresas de Gran Consumo, el 70% de estos hurtos se producen en zonas abiertas al público y por lo tanto, a simple vista.
Además de los sistemas de alarma, existen muchas opciones para evitar este tipo de delitos. Basta con adoptar algunas medidas preventivas para evitar muchos de ellos.
Por ejemplo, es fundamental que los empleados se sientas partícipes y pongan especial atención en este aspecto para poder detectar estas situaciones. En ocasiones, por muchas medidas antirrobo que se instalen o se contraten, la intuición del personal es determinante.
Para evitar este tipo de situaciones en la medida de los posible, lo primero que debes hacer es identificar los puntos débiles de tu negocio para aplicar las medidas adecuadas al mínimo coste.
Aspectos a tener en cuenta y medidas a adoptar
1. Lo primero que debes conseguir es que tu negocio sea seguro cuando está cerrado. Este aspecto, obviamente, dependerá del presupuesto que quieras invertir y del grado de seguridad que necesites. Hay una amplia gama de opciones; rejas de seguridad, cristales blindados de seguridad, láminas de seguridad para ventanas, ventanas de PVC, persianas de seguridad, etc.
2. Contrata un buen seguro en cuanto abras tu nuevo negocio. Es aconsejable invertir un poco más y elegir uno específico adaptado a tu negocio, y no contratar el mínimo que te obliga la ley. Invertirás más pero tu negocia estará más seguro y tú mucho más tranquilo.
3. Dicen que la experiencia es un grado, y en estos casos casi siempre es cierto. A menudo las apariencias engañan pero con el tiempo te irás dando cuenta de ciertas señales sospechosas y movimientos y atuendo extraños, que te darán pistas de posibles hurtos.
4. Otro sistema que puedes instalar es la entrada sonora, que emitirá un sonido cuando alguien cruce el umbral de tu negocio. También puedes utilizar espejos para tener visibilidad de rincones o zonas escondidas.
5. Ordena tu tienda y pon los artículos de más valor donde puedas verlos fácilmente, en una urna o tras el mostrador, es decir, fuera del alcance de la mano de los amigos de lo ajeno.
6. En cuanto a la caja, hoy en día cuentas con varias opciones de cajas seguras. Las que más se ven en los comercios son las llamadas cajas de superficie, que van atornilladas a una base y no conlleva ningún tipo de obra. Las hay de varios grados de seguridad y precios, dependiendo del espesor de sus paredes, tipo de cierre, etc. Las más utilizadas son las de cobro, que permiten depositar el dinero de manera segura y rápida a través de una ranura. Las hay también profesionales, para joyerías o tiendas de arte, e ignífugas a prueba de incendios.
