Los contratos que implican movilidad laboral han alcanzado en 2015 la cifra más alta de todo el siglo, hasta registrar 2.383.464 contratos de este tipo, después de tres años de crecimiento consecutivo. De 2001 a 2007, estos contratos también aumentaron de manera constante, pasando de 1.461.057 a 2.276.249, la segunda cifra más alta de toda la serie, según un estudio de Randstad.
La empresa de recursos humanos también analiza la tasa de movilidad de los trabajadores españoles, es decir, el porcentaje de contratos que implican el desplazamiento del profesional a otra provincia respecto al total. Durante 2015, la tasa de movilidad se situó en el 12,8%, medio punto porcentual por encima de la registrada el año anterior. Desde 2007, exceptuando la cifra de 2012 (11,5%), la tasa de movilidad siempre ha superado el 12% del total.
Por sectores, la agricultura es el que mayor tasa de movilidad registra. Uno de cada cinco contratos firmados en este sector supone el desplazamiento del profesional a otra provincia. Construcción se sitúa en la segunda posición, con un 15,7% de tasa de movilidad. Le siguen servicios, con un 11,2%; e industria, con un 9,8%.
Randstad destaca que la región donde se encuentra el trabajador es determinante a la hora de acceder al mercado de trabajo, ya que hay dos tipos de provincias, emisoras o receptoras de trabajadores. Las receptoras son aquellas que reciben más profesionales de los que se marchan a trabajar a otra provincia; mientras que las emisoras son aquellas regiones de las que salen más trabajadores de los que entran.
Actualmente, las principales provincias receptoras de empleados son Madrid y Barcelona. Ambas tienen un saldo positivo de 206.163 y 55.520 trabajadores, respectivamente. Le siguen Baleares (39.717), Murcia (25.013) y Álava (21.757). En España hay dieciséis provincias receptoras.
En el lado contrario, se sitúan Cádiz y Toledo, con saldos negativos de 46.901 y 41.577 trabajadores, respectivamente. Después, se sitúan Sevilla (-22.671), Pontevedra (-22.671) Tarragona (-22.102), Alicante (-20.698) y Ciudad Real (-20.046).
CASTILLA-LA MANCHA Y LA RIOJA, A LA CABEZA
Por último, Castilla-La Mancha y La Rioja han registrado una tasa de movilidad superior al 25%, es decir, uno de cada cuatro contratos que se han firmado en estas comunidades ha implicado el desplazamiento del profesional a otra provincia. Castilla y León y Aragón son las regiones que se encuentran a continuación en el ranking, ambas por encima del 15% y de la cifra registrada a nivel nacional. También por encima de la media nacional se encuentran Euskadi (13,7%), Comunidad Valenciana (13,5%), Murcia (13,5%) y Madrid (13,1%).
En el lado contrario, se sitúan Extremadura, Asturias y Canarias. Estas tres comunidades autónomas registran una tasa de movilidad inferior al 10%. En concreto, Canarias es la que menor índice registra, con un 5,6%. La especial situación geográfica del archipiélago canario hace que su tasa sea la menor.