Si eres autónomo es fundamental que diferencies los bienes de inversión del resto de tus compras. Además de tus obligaciones fiscales como autónomo, debes llevar un Libro registro de tus bienes de inversión y es importante que sepas diferenciarlos del resto de gastos ya que también tendrás que deducirlos de manera diferente. A continuación, vamos a explicarte qué es un bien de inversión y cómo detectarlo.
Qué es un bien de inversión
Según Hacienda, un bien de inversión del autónomo es todo aquel gasto que hayas efectuado para tu negocio y pueda ser utilizado durante más de un año. Dicho de otra forma, su ciclo de vida tiene que ser superior a los 12 meses. Sobra decir que el producto que adquieras debe estar directamente relacionado con tu actividad laboral y seguir la normativa de deducción de impuestos.
Pero no todas las compras que realices, por el mero hecho de ser cosas te van a durar más de un año, son bienes de inversión. Ten en cuenta que no pueden ser bienes consumibles. Si por ejemplo compras tinta para la impresora que te va a durar más de un año, no es considerado un bien de inversión.
Por lo tanto, y tal y como indica la normativa, solo se consideran bienes de inversión los bienes “corporales, muebles, semovientes o inmuebles”.
A continuación, te ponemos algunos ejemplos de bienes que no se consideran bienes de inversión:
- Accesorios y piezas de recambio comprados para reparar otros bienes de inversión.
- Obras para reparar otros bienes de inversión.
- Envases o embalajes, aunque vayan a ser usados por más de un año.
- Uniformes.
Estos gastos tendrías que anotarlos en tu contabilidad como gastos de compra y deducir sus impuestos correspondientes de manera normal.
Importe para considerar un bien de inversión
Otro factor para saber si un gasto es considerado bien de inversión es cuánto te ha costado. Será analizado por la Ley de IVA y por la Ley de IRPF.
En cuanto al precio, hay que considerar las siguientes cifras sin tener en cuenta el IVA, solo la base imponible.
- Concepto de bien de inversión a efectos de IVA: El importe para considerar un bien de inversión a efectos de IVA es de 3005,06€. Pero este importe corresponde a la base imponible así que no incluyas el IVA al calcularlo porque lo deducirás de manera normal.
- Concepto de bien de inversión a efectos de IRPF: El importe para considerar un bien de inversión a efectos de IRPF debe ser superior a 300€.
En ambos casos el importe no puede ser el de una factura recapitulativa. Hablamos del precio de un único producto, no de varios importes individuales agrupados en una sola factura.
Ejemplos de lo que sí se considera un bien de inversión
A continuación, vamos a exponerte algunos ejemplo de lo que sí son considerados bienes de inversión, por otra parte compras bastante comunes para un autónomo.
- Programa informático o software.
- Teléfono móvil.
- Mobiliario para poder trabajar, aunque trabajes en casa como freelance.
- Ordenador, impresora, tablet, etc.
- Cámara fotográfica, cámara de vídeo, etc.
Por lo tanto, para saber qué se considera un bien de inversión debes tener en cuenta cuatro factores:
- Que necesites el producto para poder desempeñar tu actividad económica.
- Que su ciclo de vida sea superior a un año.
- Que no sea un bien consumible.
- Que se trate de un único producto cuya base imponible supere en sí mismo los importes en concepto de IVA e IRPF.