En todos los procesos de selección se suelen exigir diferentes requisitos y habilidades a los candidatos que en la mayoría de los casos se pueden adquirir si la empresa dedica algo de tiempo y recursos en formar a sus empleados. Pero existen otro tipo de cualidades que se tienen o no se tienen, y que por desgracia, es muy difícil de ver en una entrevista.
Estas personas, con cualidades «especiales» se suelen reconocer rápidamente cuando extendemos una conversación más allá de una entrevista de trabajo o con el trato continuado. Y este tipo de personas que vamos a nombrar a continuación no sólo son ideales para el funcionamiento de un negocio, sino que lo son también para el desarrollo de tu carrera profesional; de una forma o de otra, te ayudarán a lograr tus objetivos.
EL VISIONARIO
El visionario ve cosas que el resto no son capaces de ver. A menudo se confunden con locos ilusos, pero como decía Steve Jobs, «sólo la gente suficientemente loca como para pensar que puede cambiar el mundo, son los que acaban cambiando el mundo».
A menudo el visionario se anticipa a una situación, a un nuevo mercado, y en ocasiones, incluso es capaz de fabricar un producto para el que el consumidor aún no está preparado. Es fácil detectar a un visionario pues siempre está dejando volar su imaginación planteando escenarios. Tiende a rechazar lo existente.
EL CREATIVO
Como dice Sir Richard Branson, «si contratas gente creativa, nunca tienes que decirles lo que deben hacer; no tienen tiempo ni de aburrirse ni de desmotivarse, pues siempre están ocupados en nuevas ideas«.
Si haces un equipo de visionarios y buenos creativos, tendrás un equipo verdaderamente loco, pero probablemente sea una locura genial para el futuro de la empresa y la anticipación con respecto a la competencia, además de una plantilla motivada.
EL REALISTA
El optimismo está bien, pero a veces no es realista, y el pesimismo es nefasto, pero en ocasiones, el pesimista es más realista que el optimista. El ideal para el éxito, sin duda, es el optimista realista.
Necesitas alguien que viva con los pies en la tierra; una persona sensata capaz de ver la situación exactamente como es, y no como debiera ser.
Un optimista puede pensar que un negocio en concreto no será afectado por las nuevas tecnologías, un pesimista creería que el negocio ya está perdido; el realista buscará la forma de unir ambos conceptos.
EL IDENTIFICADOR Y POTENCIADOR
Toda empresa necesita a una persona con el talento para reconocer los talentos de los demás y sacarles provecho.
El identificador sabe que nadie lo sabe todo, pero que todo el mundo sabe algo. Por tanto, es capaz de sacar lo mejor de cada persona, y un poco de muchos bien aprovechado, suele marcar la diferencia en una empresa.
Detectar una habilidad provechosa en una persona no es fácil. Encontrar a una persona con el talento para identificar a esas personas, es aún más complicado.
Y este tipo de personas son las que encontraríamos en todas y cada una de las empresas de éxito.