El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, insiste en que el déficit público se situará «por debajo del 3% del PIB» en 2017, tal y como prevé el último programa de estabilidad (2,9%), pese a que la Comisión Europea ha situado esta cifra en el 3,1% en sus últimas previsiones de primavera.
«Creo que en los propios números de la Comisión Europea se ve perfectamente que pasar del 3,1% al 2,9% del PIB es perfectamente factible», ha dicho en declaraciones a los medios para añadir que «no será ninguna dificultad insalvable para el próximo Gobierno el reducir el déficit por debajo del 3%».
Más aún, Guindos ha llegado incluso a decir que «la diferencia es perfectamente subsanable y el año que viene el déficit estará claramente por debajo del 3% del PIB».
Guindos ha reducido las diferencias en las previsiones de déficit de Bruselas y de España en 2017 a «una cuestión de dos décimas», y ha explicado que ello se debe «fundamentalmente» a que la Comisión Europea considera que las medidas de contención adoptadas este año no se van a aplicar el próximo.
MÁS CAUTELA ANTE UNA POSIBLE SANCIÓN
Por el contrario, el ministro de Economía ha sido cauto y no ha descartado que España pueda ser sancionada por haber sobrepasado el objetivo de déficit en 2015, desde el 4,2% al 5% del PIB.
Guindos ha puesto en valor, en cualquier caso, que España ha logrado reducir su déficit público desde el 9,3% del PIB en 2011 al 5% el pasado año y que, también la Comisión Europea, espera que se reduzca aún más este año hasta por debajo del 4%.
Además, ha señalado que, en paralelo, España se ha situado en cabeza de las economías europeas que más crecen, logrando al mismo tiempo una reducción de la ratio de deuda sobre el PIB. «Es una diferencia abismal respecto a hace cuatro años», ha dicho, antes de añadir que «nadie puede cuestionar el esfuerzo que ha realizado España».
PREVISIONES DE CRECIMIENTO «IDÉNTICAS»
Por otro lado, el ministro de Economía en funciones se ha referido a las previsiones de crecimiento elaboradas por Bruselas para España, que lo sitúa en un 2,6% en 2016 frente al 2,7% del Gobierno, si bien es más optimista de cara a 2017, para el que pronostica un alza del PIB del 2,5% en lugar del 2,4%.
Nuevamente, Guindos ha asegurado que, «salvo debacle, va a ser muy difícil que España crezca por debajo del 2,7%» este año una vez registrado un crecimiento del 3,4% en el primer trimestre, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Pero más allá de los detalles, ha indicado que se trata de proyecciones «muy parecidas», que de media «son idénticas», y que «ponen de manifiesto que España sigue creciendo y creando mucho empleo».