El ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, ha afirmado este miércoles que la bajada del 0,8% del salario medio en España registrada en 2016 se debe a una caída en los salarios más altos, ya que la remuneración de los sueldos más bajos se incrementó un 10%.
Así lo ha señalado durante su comparecencia ante la Comisión de Economía del Congreso para informar de la evolución de la economía y del plan presupuestario de 2018 enviado a Bruselas, en respuesta a las críticas del portavoz de Economía del PSOE, Pedro Saura, y del diputado de Unidos Podemos, Alberto Montero, sobre la desigualdad en España.
De Guindos ha señalado que es «estrictamente cierto» que el salario medio en España bajó un 0,8% en 2016, tal y como reflejan los datos del INE; si bien ha dicho ver «importante» explicar que ese retroceso «es consecuencia de la caída de los salarios más altos» y «tiene que ver con el efecto composición de los contratos a tiempo completo y a tiempo parcial».
No obstante, ha señalado que se si observan los deciles más bajos, se constata que los sueldos más pequeños han registrado un incremento de remuneración en el salario medio del 10%, según datos del INE.
«Aunque hay una caída del salario medio es consecuencia de la caída salarial de aquellos que ganan más, mientras que entre los que ganan menos los salarios han subido de forma importante», ha apostillado.
De esta forma, ha aseverado que, según esa estadística del INE, la desigualdad salarial se redujo el año pasado, dado que «En los deciles más bajos los salarios suben, mientras que en los más altos bajan».
En todo caso, ha augurado que se producirá una «normalización salarial» gradualmente, ante una tasa de paro del 16% y un IPC que cerrará el año «próximo al 1%».
El titular de Economía ha explicado que el crecimiento de España será este año del 3,1%, si bien se contempla un impacto de la situación de Cataluña de medio punto del PIB, unos 5.000 millones de euros, por lo que la previsión para 2018 se rebajó del 2,6% al 2,3%, si bien confía en que la economía pueda crecer el año que viene «próximo al 3%» cuando «las aguas vuelvan a su curso normal» en Cataluña, tal y como adelantó ayer el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.