El secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, ha anticipado este viernes que el escenario de los próximos meses «no es excesivamente optimista» para las exportaciones, aunque ha confiado en la fortaleza del entramado empresarial que vende al extranjero para soportar los envites.
En rueda de prensa, García-Legaz ha hablado así de prudencia, después que España haya alcanzado en el primer semestre su mejor resultado en términos de balanza comercial después del dato de 2013.
Por un lado, mientras que las importaciones han caído un 0,5% hasta junio por el intenso descenso de los precios, las exportaciones crecieron un 2,3%, hasta los 128.041,2 millones de euros. Este dato sitúa a España a la cabeza de las principales economías europeas en crecimiento de las exportaciones.
Y la razón básicamente es que las tasas de inflación negativas en España han permitido una ganancia de competitividad-precio, que compensa la pérdida por la vía de una menor demanda de los países emergentes, a los que les penaliza un euro fuerte.
Del mismo modo, España se sigue beneficiando de los bajos precios del petróleo, y el número de empresas españolas que exportan no para de crecer. Este grupo ha crecido un 2% hasta junio y un 95% de ellas son ya asiduas exportadoras, 8.000 sociedades más que hace un año.
EXPORTACIONES ESPAÑOLAS
Pero el secretario de Estado de Comercio cree que el escenario no será favorable en los próximos meses. «El escenario de cara a próximos meses no es excesivamente optimista», ha dicho, para recalcar nuevamente que «en el primer semestre, aunque el escenario tampoco ha sido el ideal, los datos han sido razonablemente positivos gracias al músculo exportador de España».
La principal preocupación para el secretario de Estado de Comercio es el frenazo de la economía en la UE y el resto del mundo. «La ralentización de la economía europea y mundial no es una buena noticia para la economía española y esto va a impactar sin duda en nuestra exportación en próximos meses», ha señalado García-Legaz.
Pero los problemas también surgen al otro lado del Atlántico y se reflejan en una caída de las exportaciones en junio a países como Venezuela (-39,7%), Argentina (-24,6%) o Brasil (-9,5%).
García-Legaz asocia estas caídas, en términos generales, a un desplazamiento de los flujos comerciales «de forma natural» hacia países como Chile, Perú o Colombia, que han eliminado o están eliminado aranceles al comercio.
Pero también influye la situación de cada país, la recesión intensa en Brasil, que ha llevado a una caída de la demanda, o el deterioro profundo de la economía argentina durante los últimos años.
INFLUENCIA DEL BREXIT EN LA EXPORTACIONES
Por otro lado, los datos de la balanza comercial hasta junio aún no recogen el efecto del triunfo del ‘Brexit’ en el Reino Unido ese mismo mes.
No obstante, García-Legaz descarta «distorsiones» en las relaciones comerciales por esta causa en el medio y largo plazo, ya que las exportaciones tienen «una inercia» y porque la separación del Reino Unido de la UE tardará años en sustanciarse.
Otra cuestión es la depreciación de la libra esterlina que ha seguido al referéndum, que podría tener «un efecto adicional» en los próximos meses, en tanto que «va a ser más difícil colocar los productos» en el Reino Unido con un euro que ahora resulta más caro.
Por otro lado, pese a que los bajos precios del petróleo juegan a favor de la economía española en términos netos, García-Legaz ha recordado que también penalizan a España en su cuota como exportador de productos energéticos y de forma indirecta por cuando afectan a economías como Arabia Saudí, que es un «importante cliente» de España.
LA FALTA DE GOBIERNO PERJUDICA A LA EXPORTACIONES
A nivel interno, el secretario de Estado de Comercio ha indicado que las ventas marchan «excepcionalmente bien», sobre todo por las cifras récord del turismo, y se ha mostrado «razonablemente optimista» para lo que queda de año.
Sin embargo, ha recordado que «la inversión nunca es amiga de la incertidumbre», especialmente en sectores sensibles como el hotelero o el inmobiliario, y ha advertido de que «la certidumbre de un Gobierno en pleno funcionamiento ayudaría».