CONFEMETAL, CCOO de Industria, MCA-UGT han firmado hoy el Convenio Estatal de la Industria, la Tecnología y los Servicios del Sector del Metal, que viene a blindar la negociación colectiva provincial de ámbito sectorial y a regular las condiciones laborales de cerca de un millón de trabajadores y alrededor de 250.00 empresas.
El nuevo Convenio constituye un ejemplo de diálogo social y viene a poner orden en una estructura negocial en la que coexisten 62 convenios colectivos sectoriales provinciales y más de quinientos convenios de empresa, junto al Convenio General sobre la Ferralla, el autonómico de la Industria Metalgráfica de Cataluña y el Convenio Colectivo Estatal de la Industria Metalgráfica y de fabricación de Envases Metálicos.
A diferencia de lo que ocurría en otros grandes sectores económicos como construcción, química, seguros, textil, hostelería, madera, cárnicas, conservas vegetales, etcétera, la industria del metal carecía, hasta ahora, de una regulación convencional de ámbito estatal.
El nuevo convenio promueve la descentralización de la negociación colectiva, en línea con la tendencia reformadora europea del mercado laboral de los últimos años, permitiendo a las empresas con convenio propio el descuelgue de lo pactado en el mismo e invita, a su vez, a los convenios provinciales a que lo adapten y desarrollen en su ámbito concreto.
En el acto de la firma, que ha tenido lugar en la sede del Consejo Económico y Social (CES), el presidente de Confemetal y de CEPYME, Antonio Garamendi, ha destacado el papel de los interlocutores sociales en el “logro común” del primer Convenio Estatal de la Industria del Metal, que es una muestra de que “España sí funciona, siempre y cuando nos dejen trabajar y dar pasos por el país”. En este sentido, ha reiterado que “los empresarios necesitamos estabilidad” y ha insistido en pedir “responsabilidad y sentido común a los políticos”.
El objetivo del convenio es fortalecer y garantizar el ámbito provincial de negociación, dotando al Sector de un marco normativo común en aspectos centrales de la organización del trabajo, como son la formación y la prevención de riesgos laborales, entre otros.
La heterogeneidad del sector, que sin duda le enriquece, también le hace muy vulnerable, al estar especialmente expuesto a la fragmentación, a la acción invasora de antiguos y nuevos sectores económicos y de las nuevas formas de articulación de los intereses colectivos de carácter empresarial como clústers, empresas multiservicio, o nuevas modalidades de subcontratación, a las que da respuesta. Asimismo, el Convenio hace especial hincapié en cuestiones como la Formación y la cualificación profesional, y la prevención de riesgos laborales.
El Convenio, fundamental para el sector del metal, permitirá definir las fronteras de un sector tractor de la economía y evitar conflictos respecto al ámbito funcional y a la aparición de segmentos de actividad relacionados, por ejemplo con nuevos materiales o nuevas tecnologías.
El sector del metal es muy heterogéneo y está compuesto por muchas pequeñas empresas, incluso microempresas, para las que los convenios provinciales, y ahora también este estatal, son imprescindibles para regular sus condiciones de trabajo.
El Convenio que ahora debe desarrollarse y enriquecer sus contenidos para ser cada vez más útil a las empresas y a los trabajadores, es también una buena herramienta para asegurar la unidad de mercado y para fijar reglas de competencia uniformes y claras para todos los actores del sector del metal.
Para Confemetal “un acuerdo como éste entre los interlocutores sociales sirve siempre para hacer más productivas y competitivas a las empresas y para mejorar el clima laboral y las condiciones de trabajo”.