La recuperación económica global tras el retroceso sufrido a causa de la pandemia se ha encontrado en los últimos meses con un inesperado obstáculo que ya está teniendo sus efectos a escala global. Se trata de una fuerte crisis en la cadena de suministro; y todo lo que ello acarrea: desabastecimiento y escasez de productos, subida de precios, demoras en las entregas de diferentes mercancías, etc.
Para conocer la visión de los españoles al respecto de esta cuestión, Appinio ha llevado a cabo una encuesta que revela que esta preocupación es ya una realidad creciente entre los españoles:
- El 26% de los encuestados no ha podido comprar algo que quería por falta de disponibilidad.
- 25,9% ha sufrido retrasos considerables en las entregas de sus pedidos (el 32% de los mismos, con retrasos de entre 1 y 2 semanas)
- 58% de los encuestados está preocupado por la crisis de suministro.
- 36% comprará productos fabricados en España para evitar problemas logísticos (de envío, etc.)
- 36% planificará sus compras navideñas con antelación para evitar problemas de desabastecimiento.
- Para los encuestados, las categorías de productos en las que se experimenta mayor escasez o demora en las entregas son las siguientes: 17,2% tecnología y electrónica; 17,1% ropa y calzado; 13,1% alimentación y bebidas y 9,2% cuidado personal e higiene.
- En esta línea, las categorías de productos en los que más se percibe una subida significativa de precios son: 52,8% gasolina o diésel; 26,6% alimentación y bebidas; 16,5% tecnología y electrónica y 13,8% materiales de construcción.
- Los españoles creen que los factores que más han influido en esta crisis han sido: 54,1% dependencia en los productos manufacturados en Asia; 51,4% pandemia de Covid-19 (parones productivos, cambios en los patrones de consumo); 31,7% aumento generalizado de la demanda global de productos; 29,2% aumento de la demanda debido al auge del comercio electrónico; 27,4% el Brexit.