Sólo una de cada cinco personas que estaban desempleadas en la Unión Europea (UE) en el primer trimestre del año logró encontrar un empleo entre abril y junio, lo que equivale al 19,5% del total de parados, según Eurostat, que sitúa a España en el puesto 18 entre los 26 países cuyos datos estaban disponibles, con una tasa de transferencia del 18,4% desde una situación de paro al empleo.
En el segundo trimestre del año el 63,2% de los desempleados de la UE (12,6 millones de personas) siguieron en paro, mientras que el 19,5% (3,9 millones) encontraron empleo y un 17,3% (3,5 millones) pasaron a ser considerados inactivos económicamente, categoría que incluye a estudiantes, pensionistas y aquellas personas que no trabajan y no buscan empleo.
Por otro lado, un 97,3% de las personas con empleo en el primer trimestre (170,8 millones) siguió trabajando en el trimestre siguiente, mientras el 1,2% de los ocupados entre enero y marzo (2 millones de personas) estaban en situación de desempleo en el segundo trimestre y un 1,6% (2,7 millones) pasaron a considerarse inactivos.
En el caso de la población de la UE económicamente inactiva en el primer trimestre, mantuvieron esta condición en los tres meses siguientes el 93,3% (106,1 millones), mientras el 6,7% entró al mercado de trabajo, incluyendo un 3,1% (3,6 millones) de inactivos que encontraron empleo en el segundo trimestre y un 4,1% que pasaron de inactivos a desempleados.
Entre los 26 países de la UE cuyos datos estaban disponibles, la mayor tasa de transferencia desde el paro al empleo, un dato útil para valorar el grado de rigidez o flexibilidad de los mercados laborales, las mejores cifras en el segundo trimestre se observaron en Estonia (36,9%), por delante de Dinamarca (36,6%) y Suecia (31,3%).
Por contra, las tasas de transferencia más bajas se registraron en Grecia (8,6%), Rumanía (11,6%) y Bulgaria (11,9%), seguidos de Irlanda (15%), Eslovaquia (15,1%), Lituania (17,1%), Italia (17,4%), Luxemburgo (18,2%) y España (18,4%).