España ha mejorado durante el primer trimestre su posición competitiva con la UE en términos de precios, gracias a la reducción de su tasa de inflación en este periodo, según datos del Ministerio de Economía.
El departamento que dirige Luis de Guindos elabora el Índice de Tendencia de Competitividad (ITC) calculado a partir de los índices de precios (IPCs) de los diferentes países.
Así, el ITC calculado frente a los países de la UE-28 disminuyó un 0,6% interanual en el primer trimestre de 2016. Un descenso en este índice implica una ganancia de competitividad exterior de la economía.
De este modo, España acumula diez trimestres consecutivos de ganancias de competitividad en términos de precio, principalmente por la caída del IPC (-1,1%), en tanto que el tipo de cambio registró una subida del 0,4%.
Frente a los países de la zona euro, el ITC también retrocedió un 1,1% en este periodo, también por una reducción de la inflación, que contrasta con el ligero incremento de los precios de los otros miembros de la eurozona.
Sin embargo, España registró una pérdida de competitividad frente a los países de la UE que no pertecenen a la zona euro, con un aumento del TIC del 0,7%. La causa principal fue la apreciación del euro frente a las monedas de estos países, con un incremento del índice de tipo de cambio del 1,7%.
ESTABILIDAD FRENTE A LA OCDE
Economía muestra, en cambio, que la competitividad exterior se mantuvo estable durante el primer trimestre frente a los países de la OCDE, debido a una subida del índice de tipo de cambio del 1,6% y de la reducción del 1,5% en el caso del índice de precios.
Por otro lado, España perdió posiciones en relación con los aquellos que, dentro de este perímetro, no pertenecen a la UE, por la apreciación del euro frente a las principales monedas de estos países en un 2,7% y por la reducción del índice de precios relativos del 1,9%.
Se rompe así una tendencia de sucesivas mejoras de competitividad frente a cada una de estas zonas que se venían registrando desde el tercer trimestre de 2014.
PÉRDIDA DE COMPETITIVIDAD FRENTE A LOS BRICS
Por otro lado, la competitividad de España frente a los BRICS –Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica– cayó un 2,4% entre enero y marzo dejando atrás sucesivas mejoras de competitividad observadas en los seis trimestres anteriores.
La causa fue la considerable subida del índice de tipo de cambio (+7,5%), que contrasta con las caídas del 7,2%, 11,3%, 2,8% y 1,6% registradas en cada uno de los trimestre de 2015, a pesar de la fuerte reducción que experimentó el indicador de precios relativos frente a este grupo de países (-4,7%).
Además, la inflación media de los BRICS super la española desde el tercer trimestre del año 2006. Sin embargo, es en la importante apreciación del euro frente a las monedas de estos países registradas hasta marzo, donde se puede encontrar la justificación de la pérdida de competitividad respecto a esta zona.
COMPETITIVIDAD SEGÚN EL VALOR DE LAS EXPORTACIONES
El Ministerio de Economía también ofrece los resultados del ITC calculado a partir de los valores de las exportaciones –índices de valor unitario (IVUs)–, de lo que se desprende que España ganó un 2,4% de competitividad en el cuarto trimestre de 2015 con la UE-28 debido a la caída del índice de precios relativos de exportación (-1,7%) y al índice de tipo de cambio (-0,8%).
Economía explica que la caída del índice de precios relativos significa que la tasa interanual de los precios de exportación españoles es inferior a la tasa media de los del resto de los países de la UE-28. De esta forma, ascienden a doce los trimestres consecutivos en los que España gana competitividad frente a esta zona.
Frente a los países de la zona euro, España incrementó su competitividad un 1,6% en el cuarto trimestre, con una disminución del índice de precios en la misma cuantía.
Respecto a los países de la UE fuera de la eurozona, el ITC se redujo un 4,8%, con lo que España acumula siete trimestres de mejoras de la competitividad en términos de precio frente a esta zona. Tanto el índice de tipo de cambio como el de precios relativos de exportación contribuyeron a este resultado al disminuir ambos un 3,2% y un 1,7%, respectivamente.
Frente a la OCDE, España también ganó competitividad en el cuarto trimestre de 2015, con un retroceso del ITC del 0,7%, debido al descenso del 2,9% en el tipo de cambio, ya que el de precios repuntó un 2,3%.
Por su parte, el ITC se mantuvo estable frente a los países de la OCDE que no pertenecen a la zona euro entre septiembre y diciembre de 2015 debido al efecto conjunto del aumento del índice de precios relativos en un 5,2% y de la reducción en un 4,9% del de tipo de cambio.
Frente a la OCDE no UE-28, el ITC se incrementó un 1,4%. En este caso se produjo una pérdida de competitividad vía precios (+1,7%), aunque el índice de tipo de cambio disminuyó en un 5,3%.