Como finalista de los PREMIOS CEPYME 2017 en la categoría de “Pyme por la inclusión laboral de las personas con discapacidad”, hoy entrevistamos a Francesc Sistach, Director General de SPECIALISTERNE.
¿Cree que el premio CEPYME 2017 podría mejorar la imagen de su empresa de cara a clientes, proveedores y futuros inversores?
Sí, cualquier reconocimiento público es una prueba de que lo que hacemos tiene sentido, y eso, sumado al reconocimiento de muchos clientes que nos contratan, constata que las personas con autismo y Asperger sí pueden trabajar y hacerlo con rendimiento y calidad.
¿Dónde ve su empresa dentro de 2 años?
En los 4 primeros años hemos creado, directa o indirectamente, más de 100 puestos de trabajo. Y hemos creado oficinas en Madrid, Barcelona y Sao Paulo. Y vamos cogiendo ritmo. Así que en dos años esperamos ser más de 150 personas en España y tener alguna oficina más en Latinoamérica. Y, sobre todo, esperamos haber contribuido mucho más a cambiar la percepción de la sociedad sobre las personas con autismo o Asperger.
¿Cómo conoció los premios CEPYME?
A través de la Fundación ONCE en primera instancia, pero después los hemos ido viendo en muchas partes.
¿Por qué ha tomado la decisión de presentarse a los premios CEPYME?
Creemos que somos un ejemplo de pyme que está trabajando por la inserción laboral de un colectivo que ha recibido hasta ahora muy poco soporte. Ahí somos pioneros, pero ya con un modelo probado. Y pensamos que ya podemos buscar reconocimientos que nos ayuden a generar más impacto social.
¿Cómo considera usted que podría repercutir a su PYME la posibilidad de ganar el premio PYME por la inclusión laboral de personas con discapacidad?
Ganemos o no, ser finalista ya es un premio en sí mismo. Vemos el valor de la difusión que hace CEPYME, y el valor del “sello” que podríamos obtener.
¿Cómo considera que se podría mejorar la inserción de las personas con discapacidad en el mundo laboral?
Queda mucho por hacer. Formar parte de la red internacional de Specialisterne nos permite comparar modelos legales y realidades sociales de diferentes países. En España tenemos algunas cosas muy buenas, pero estamos atrasados en otras respecto a países europeos y de Latinoamérica. Claramente falta un esfuerzo en el diagnóstico de los adultos con autismo o Asperger, más apoyo económico a la formación y soporte que prestamos los que nos dedicamos a la inserción laboral, más facilidad para crear centros especiales de empleo, una voluntad clara de hacer cumplir la LGD (la LISMI). Invitaría a hacer un estudio comparativo en Europa y en Latinoamérica para recoger buenas ideas. Con un poco más de apoyo, se podrían crear fácilmente muchos más puestos de trabajo.
