Los secretarios de Estado de Empleo y de Seguridad Social, Juan Pablo Riesgo y Tomás Burgos, han valorado este lunes los datos de paro y de afiliación a la Seguridad Social hechos públicos hoy, ya que se mantiene el ritmo «intenso» de reducción de desempleo, si bien constatan una «ligera desaceleración» respecto a finales de 2015 y advierten de que la incertidumbre puede afectar a sectores como el de la construcción y los servicios.
Así lo han señalado en la rueda de prensa de presentación de los datos de paro y afiliación a la Seguridad Social correspondientes al mes de marzo, cuando el desempleo se redujo en 58.216 personas y el sistema de la Seguridad Social ganó 138.086 afiliados.
Riesgo ha señalado que «no se trata de levantar ninguna liebre», si bien la «ligera desaceleración» en el empleo es la «constatación de un hecho objetivo», y ha recordado que en términos de afiliación a la Seguridad Social se ha pasado de un incremento del 3,2% al 2,8%.
No obstante, ha valorado la «intensa» reducción de desempleo, del 8% en tasa interanual durante el pasado mes de marzo, y ha destacado que esa disminución del paro se produjo en todos los sectores y en todas las comunidades autónomas.
En el trimestre, Riego ha indicado que los datos son «muy semejantes» en incremento de paro, algo «muy habitual» en los tres primeros meses del año, siendo de 1.200 personas el aumento de este año, frente a los 4.200 del mismo periodo de 2015, mientras que la afiliación subió en 57.000 personas en el primer trimestre del año pasado, cuando no coincidió la Semana Santa, y en este se ha reducido en 2.600 personas. «En el caso de la afiliación hay un cierto comportamiento peor este año», ha agregado.
En cuanto a los tipos de contratos, ha vuelto a insistir en que España lidera la creación de empleo indefinido en la zona euro y en que el número de asalariados afectados por contratos temporales «no ha variado sustancialmente en los últimos años», y el número de contratos de corta duración es «incluso inferior» que al inicio de legislatura. En concreto, ha apuntado que las contrataciones indefinidas en marzo alcanzaron los 150.726, frente a los 117.934 contratos de marzo de 2011, un 40% más.
CONSTRUCCIÓN Y SERVICIOS, POSIBLES AFECTADOS POR LA INCERTIDUMBRE
Por su parte, el secretario de Estado de la Seguridad Social, Tomás Burgos, ha recalcado que el aumento del 2,81% de la afiliación es «francamente positivo» y «significativo», aunque algo inferior al de 2015, que fue un «año excepcionalmente bueno, el mejor de la serie histórica» y al ritmo de tasas superiores al 3% que venía registrando.
«Esa desaceleración sí se ha producido, no en gran dimensión, pero en un análisis de regímenes hay que prestar atención a sectores más sensibles a posibles incertidumbres, claramente el sector de la construcción y de los servicios lo son», ha apuntado Burgos, para añadir que «aunque los datos en este mes son francamente positivos, un análisis algo más detallado de sus componentes nos permite seguir manteniendo esa percepción de que algunos sectores pueden verse afectados por la existencia de dudas o incertidumbre por el futuro económico y político».
En esta línea, ha detallado que la evolución de la afiliación en construcción fue «significativamente mejor» en los meses de marzo de años anteriores, ya que, aunque este año ha sido positivo y ha superado los 5.000 afiliados más, ha sido «muy inferior» a las tasas del mismo mes en ejercicios anteriores.
Así, ha advertido de que los datos dicen «claramente» que, en las mismas condiciones que en años anteriores, la construcción y sectores afines al mismo, como las actividades inmobiliarias, «no están evolucionando de forma tan positiva como en ocasiones anteriores».
En cualquier caso, ha asegurado que 2014 y 2015 serían los dos mejores años desde 2007, «y con éste los tres serían los mejores años de la serie histórica», y ha aclarado que la merma de afiliados en el campo depende exclusivamente de factores climatológicos y de variaciones en los calendarios de algunas campañas. Ha agregado que espera que la tendencia se mantenga en los próximos meses con el comienzo de la temporada estival.
DÉFICIT DE LA SEGURIDAD SOCIAL
Por otra parte, preguntados por el déficit de la Seguridad Social, Burgos ha señalado que se debe a «diferentes factores», y ha defendido que los «aparentes menores ingresos no corresponden a la realidad», al tiempo que considera que «el sistema debe mirar a medio y largo plazo y le interesa que aumente la base de cotizantes, aunque sea como ayudas circunstanciales y coyunturales como constituyen reducciones y bonificaciones en el sistema de la Seguridad Social».
«Lo importante es que estamos asistiendo a un incremento significativo de afiliación a la Seguridad Social, es un dato enormemente positivo», ha apuntado Burgos, quien, no obstante, ha reconocido que «a la Seguridad Social no le gusta convivir con ese déficit».
Según Burgos, ese déficit tiene «causas en variables netamente sociales», como son el incremento en la revalorización de pensiones y la ganancia de poder adquisitivo por encima del IPC, y que tiene incidencia en el gasto, así como evolución de las bases de cotización, que «tienen su causa en la existencia de tres años de inflaciones negativas».
De igual forma, Burgos ha destacado que los ingresos a la Seguridad Social están creciendo de forma «vigorosa», aunque «históricamente moderada», por encima del 3%, y que el gasto en pensiones contributivas en función del porcentaje del PIB disminuyó una décima en 2015 respecto al año anterior. «Tenemos que seguir impulsando crecimiento de ingresos, equipararlo a crecimiento de gastos y evidentemente superarlos, porque será la única manera de ir reduciendo este déficit», ha añadido.
Además, ha dicho compartir «absolutamente» las palabras del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, sobre la mayor incidencia de las pensiones en el déficit y la insuficiencia de las cotizaciones, ya que «están basadas claramente en un análisis adecuado de la realidad».
DIÁLOGO PARA BUSCAR NUEVOS RECURSOS
El secretario de Estado de la Seguridad Social ha señalado que las cotizaciones sociales hace «mucho tiempo» que dejaron de ser suficientes para atender la financiación en exclusiva del sistema de pensiones. De hecho, ha precisado que las aportaciones del Estado con este Gobierno han crecido «significativamente», hasta más de 13.000 millones al año, para atender todo el ámbito no contributivo anteriormente financiado en gran medida con cotizaciones sociales, incluyendo complementos a mínimos, prestaciones familiares o pensiones no contributivas.
Igualmente, ha apuntado que el Gobierno remitió el pasado viernes un informe «muy detallado» al Pacto de Toledo para sentar las bases de diálogo que permitan añadir nuevos recursos al sistema desde un «análisis realista y claro», y sobre la conveniencia de que la financiación sea uno de los elementos de la renovación de dicho pacto.