“Los mejores equipos serán los que sean capaces de sacar partido tanto a las fortalezas de las máquinas como a las de los humanos”.
Alexandra Levit se ha convertido en una de las personas más influyentes a la hora de hablar del futuro del trabajo y de las nuevas tendencias en recursos humanos. Se define a sí misma como “futurista de negocios” (business futurist) y describe su ocupación en unas pocas palabras: “ayudo a las organizaciones a prepararse para triunfar y progresar en el trabajo del futuro”.
Esta conferenciante, escritora (entre otros del bestseller “They don´t teach corporate in college”) y consultora (es socia de People Results) ha escrito para medios como The Wall Street Journal, Forbes o The New York Times, donde describe un mundo laboral más global, flexible e individualizado; donde los Millenials siguen ganando protagonismo y las personas tendrán que acostumbrarse a trabajar junto a robots; y donde la gamificación y el aprendizaje a través de videojuegos se consolidan en la formación que ofrecen las empresas.
En Gamelearn se han puesto en contacto con ella y le han hecho unas preguntas sobre algunos de los temas que marcarán el futuro de los recursos humanos y la formación y el desarrollo en todo el mundo:
– Alexandra, a menudo hablas del futuro del trabajo y de los grandes cambios que nos traerán los próximos años. ¿Cuáles son las principales tendencias —tecnológicas, sociales, económicas— que están transformando actualmente las empresas, los negocios y a los trabajadores en todo el mundo?
– Si las empresas y los negocios están experimentando cambios, parece lógico que también le suceda a los departamentos de recursos humanos. ¿Cuál crees que será su mayor prioridad en los próximos 10 o 20 años?
Aquí van algunas ideas:
- Los recursos humanos pasarán de ser una función independiente y claramente definida, encargada de administrar los procesos relativos a recursos y a gestión del talento, a abarcar varias disciplinas, actuando en varios departamentos a la vez para ofrecer experiencias de trabajo integradoras y multifuncionales.
- Las organizaciones dejarán de tratar a todo su personal como si fuera una única entidad y tratarán a cada empleado como una “plantilla de una sola persona”. De ese modo, podrán ofrecer soluciones de gestión del talento y de recursos humanos personalizadas.
- Las organizaciones sacarán partido a su nueva plantilla extendida: una red global de trabajadores externos, suministradores, etc.
- Los recursos humanos se transformarán para adaptarse a un mundo más global, gestionando plantillas móviles que traspasan las barreras geográficas.
- En lugar de depender de soluciones dictadas por los directivos, las organizaciones estarán llenas de trabajadores del conocimiento que aprovecharán las redes sociales para crear soluciones conjuntas con otros, lo que cambiará profundamente las estructuras organizativas, la jerarquía y los cargos en el trabajo.
- Además, gracias al análisis predictivo, los recursos humanos podrán dotarse de unas herramientas y un conocimiento científico que podrán utilizar para impulsar el rendimiento de su personal.
– En los últimos años, se habla mucho de robots y automatización, y muchos trabajadores temen perder sus empleos (entre ellos, los que trabajan en recursos humanos). ¿Hay motivos para estar tan preocupados? ¿Qué responsabilidad tienen los departamentos de recursos humanos en la combinación de humanos y robots en las empresas?
La economía cada vez tendrá menos empleos que ofrecer y los trabajadores del futuro se centrarán en desarrollar habilidades propias que les permitan trabajar productivamente sin verse desocupados. Tendrán que averiguar qué tareas solicitan otras personas y hacerlas.
Contar con un buen empleo dependerá de las tareas no rutinarias y que solo los humanos pueden hacer, contribuciones interactivas o analíticas que suelen estar relacionadas con el descubrimiento, la innovación, la gestión de equipos, el liderazgo, las ventas y la formación.
Actualmente, por otra parte, dondequiera que una máquina forme parte de un equipo, hay un humano tras ella encargado de desarrollarla, entrenarla, gestionarla y repararla cuando deja de funcionar. Teniendo todo esto en cuenta, los mejores equipos serán los que sean capaces de sacar partido tanto a las fortalezas de las máquinas como a las de los humanos y, por supuesto, los recursos humanos desempeñarán su papel construyendo esos equipos.
– Otro tema candente del momento es la guerra por el talento. Formamos parte de la llamada economía del conocimiento, por lo que la mayoría de las empresas pelean por las mejores mentes. ¿Cómo pueden los recursos humanos atraer, formar y retener a los mejores profesionales? ¿En qué deben centrarse?
Los déficits de cualificaciones están aumentando y los responsables de recursos humanos se ven cada vez más presionados para asegurar que sus organizaciones cuentan con el talento adecuado. De ahí que los recursos humanos deberán proporcionar dichas cualificaciones con rapidez, cuándo y dónde se necesiten. La organizaciones, para mantener comprometidos a los empleados a lo largo de todo su desempeño, tendrán que ofrecer una experiencia auténtica y atractiva en cada fase de su ciclo de vida, desde la selección de nuevo personal hasta el momento en que se convierten en ex empleados.
– Deloitte, en un reciente informe, ha identificado el “aprendizaje continuo” como una de las diez grandes tendencias de los recursos humanos. En los tiempos actuales, tan cambiantes, con tantas nuevas tecnologías, profesiones y capacidades solicitadas por las empresas, ¿cómo puede un director de Formación y Desarrollo mantener formados y al día a sus empleados? ¿Cuál debe ser su prioridad?
En dos palabras: bajo demanda. Las empresas deben ofrecer la formación cómo, dónde y cuándo los empleados la necesiten apoyándose en tecnologías como las redes sociales, la gamificación, la nube, la movilidad y las analíticas.
– Siguiendo con este tema y considerando que los Millennials y los pertenecientes a la Generación Z cada vez están más presentes en las empresas, ¿pueden la gamificación, el aprendizaje a través de videojuegos (game-based learning) y los simuladores ayudar en esta tarea?
Por supuesto: esas tecnologías pueden ayudar y, de hecho, ya lo están haciendo porque es más probable que los empleados más jóvenes se involucren más con la formación online si está gamificada y ésta resulta especialmente útil con los grupos de trabajadores dispersos geográficamente que no pueden juntarse en una sala de reuniones.