La actividad del sector manufacturero de España moderó su ritmo de expansión en febrero, según el índice PMI, que bajó a 54,1 puntos desde los 55,4 del mes anterior, aunque las fábricas españolas fueron capaces de generar empleo al mayor ritmo desde julio de 2015.
«Los fabricantes españoles continuaron su tendencia alcista en febrero a pesar de la reinante incertidumbre económica y política, aumentando una vez más la producción a un ritmo fuerte y contratando a más personal a la tasa más rápida desde el verano de 2015», apuntó Andrew Harker, economista senior de Markit y autor del informe.
Los nuevos pedidos en el sector manufacturero aumentaron sólidamente durante febrero en medio de informes de nuevos pedidos recibidos de los
clientes habituales y de los mercados de exportación.
Este crecimiento de los nuevos pedidos contribuyó a una acumulación de los pedidos pendientes de realización, que han aumentado ininterrumpidamente desde octubre de 2015.
De este modo, la tasa de creación de empleo se aceleró por segundo mes consecutivo en febrero y fue la más fuerte desde julio de 2015.
Por otro lado, la disminución del precio del petróleo y del acero provocó un mayor descenso de los precios pagados. Así, la tasa de deflación fue la más significativa desde julio de 2009, provocando la mayor bajada de los precios cobrados en 34 meses.La caída de los precios de las materias primas fue de nuevo un aspecto destacado del último estudio
«, y una vez más se mencionó que la reducción del precio del petróleo y del acero está teniendo un impacto en la carga de los costes de las empresas españolas», añadió Harker.
