El mercado de comercio electrónico en España no ha alcanzado su punto de madurez. Los consumidores españoles todavía realizamos un uso limitado y poco frecuente de Internet para realizar compras y seguimos prefiriendo la tienda física.
Así lo revela el informe Total Retail 2016, elaborado por PwC a partir de entrevistas con más de 23.000 consumidores de todo el mundo. Sólo el 19% de los consumidores españoles compra online, al menos, una vez a la semana. Un porcentaje por debajo de la media mundial, situada en el 29% y, por supuesto, de los principales países de nuestro entorno, como el Reino Unido -45%-, Alemania -34%-, Italia -32%- y Francia -27%-. No digamos de China, con un 71%. De hecho, si atendemos a los hábitos de compra por Internet, el comportamiento de los consumidores españoles se asemeja más a países como México y Sudáfrica.
Pero, ¿cómo compran los consumidores españoles? La tienda tradicional sigue mandando en España: una mayoría del 66% acude a establecimientos físicos, al menos, una vez al mes y un 40%, lo hace, como poco, una vez a la semana. Le sigue la compra online, a través del PC -el 42% lo usa mensualmente y un 15% de forma semanal-. Pero entre los resultados del informe llama la atención el poco peso del comercio electrónico utilizando la tableta y, especialmente, los móviles. El 58% de los consumidores españoles asegura no haber comprado nunca a través de la tableta yun 55% no haber usado nunca su teléfono móvil o su Smartphone (46% en Italia, 48% en Alemania, 56% en Reino Unido, 58% en Francia y 46% en el mundo). Dicho de otra forma, sólo un 7% de los consumidores nacionales compra a través del móvil, por lo menos, una vez a la semana. Este uso, de momento, marginal y poco frecuente del móvil como herramienta de compra contrasta con que España sea el país con mayor penetración de teléfonos inteligentes de Europa –con un 81%-.
Del informe se podría desprender que la seguridad o, mejor dicho, la percepción de inseguridad es uno de los factores que frena a los consumidores españoles. El 62% de los encuestados en nuestro país teme que sus datos de crédito le sean hackeados si compran a través de sus teléfonos móviles. Sin embargo, esta dato es más o menos similar en países como Alemania -61%, Francia -56%-, Italia -62%- y Reino Unido -66% -. Otra causa podría ser que, todavía, las compañías españolas de distribución no han invertido lo suficiente en plataformas de comercio electrónico, y los sistemas y procesos para comprar por Internet no son lo sencillos que reclaman los consumidores. El 48% de los españoles dice que es, precisamente, la sencillez y la comodidad la principal motivación que les lleva a hacer compras online, seguida del precio de los productos.
Pero, ¿qué cosas somos más proclives a comprar por Internet los españoles? El informe revela que libros, música, películas y videojuegos son -según el 55%- los productos favoritos para adquirir online; seguidos de los artículos de electrónica y ordenadores –para el 38%-, y los de moda (ropa y calzado) -el 34%-. Por el contrario, los productos de alimentación, las joyas y relojes, y los muebles son, por ese orden, los que los españoles estamos menos dispuestos a comprar por Internet. Este comportamiento está muy en línea con el de los consumidores en los principales países de nuestro entorno.
Del documento se desprende que los consumidores españoles no utilizamos Internet para comprar –al menos de forma generalizada- pero, sin embargo, si lo hacemos para buscar información sobre los productos que queremos adquirir. El 66% de los encuestados asegura que es su método preferido de informarse antes de comprar libros, música, películas y videojuegos; y un 64% cuando se trata de electrónica y ordenadores.