La producción de energía eléctrica para consumo propio individual ”tras la caída del impuesto del sol y la nueva legislación sobre autoconsumo compartido en bloques de pisos” es uno de los seis temas claves detectados en el big data y los titulares de los medios de comunicación en los últimos meses que los expertos de UniEléctrica han ordenado en un estudio, media docena de cuestiones que copan la atención de los responsables y de los ciudadanos en un momento clave para el propugnado cambio energético.
Según las conclusiones del informe, “los sistemas de autoconsumo han experimentado un auge sin precedentes, ya no sólo podemos poner paneles solares en el tejado” sino que “se empiezan a ver los primeros aerogeneradores instalados en viviendas, conocida como mini-eólica, al tiempo que las instalaciones de biomasa adquieren una especial importancia en medio rurales”, se resume al final del análisis.
Aunque se reconoce que el pilar de toda esta transformación es una mayor mentalización de la sociedad sobre las energías renovables y que “cada vez son más los españoles que han tomado conciencia de ello”, por ejemplo “con la decisión de usar en nuestros hogares energía procedente de fuentes renovables”, el estudio de UniEléctrica no olvida otras cuestiones como el impacto que ha tenido en los medios las medidas hacia la desaparición de los vehículos de motor de combustión por eléctricos, de los que ya circulan “unos 28.000” por las carreteras, señalando la importancia que tiene en este proceso “las administración, que regulan (y frenan) la electrificación necesaria en el sistema para implantar puntos de recarga y electrolineras” en todo el
territorio.
Además, y pese a no tener “un estándar asequible” por su autonomía y coste, “con una autonomía media de unos 200 km y un precio que ronda los 25.000 euros sin ayudas (poco se escucha de ellas ya), el vehículo eléctrico, recientemente “se ha ido haciendo más competitivo y, por tanto, más accesible a los usuarios”.
Otro factor que centra la actualidad y se ha detectado como clave en este momento de transición energética son las viviendas inteligentes (smart homes) y nuevos materiales de construcción, que junto a la domótica permiten “controlar aspectos como la calefacción o iluminaria en nuestras casas” y monitorizar un consumo haciendo que se pueda llegar a un ahorro entre el 25 y 30% en el consumo energético. A ello habría que añadir el desarrollo en el almacenamiento de energía, que “está cambiando nuestros hábitos y conocimientos sobre el consumo eléctrico” y el adiós definitivo a los ‘electrodomésticos vampiro’, que consumen cantidades desorbitadas en términos de energía con una eficiencia más que reducida.
Unieléctrica, vendiendo exclusivamente energía eléctrica renovable, es la empresa matriz de un grupo que tuvo una facturación bruta de 353 millones de euros y alcanzó más de 92.000 clientes en toda España, según datos al 1 de enero. Buena parte de estos consumidores son pequeñas y medianas empresas y autónomos, sector en el que el grupo Unieléctrica está especializado y a cuyas necesidades responde específicamente con estudios previos para de ahorro, contratos ajustados a sus necesidades y ventajas como la financiación del cambio de luminarias por luces
leds, condensadores para evitar las sanciones por energía reactiva, telemedida y submetering, etcétera. En ocasiones, las facturas llegan a abaratarse en un 30% respecto al anterior contrato con otra comercializadora.