Los III Premios FADE, que se celebrarán el próximo 26 de noviembre en el Teatro Filarmónica de Oviedo, reconocen en la categoría “Empresa de Asturias” a Crivencar-Tierra Astur, una marca emblemática del sector agroalimentario asturiano que ha destacado por su compromiso con la identidad y la gastronomía regional, y en la categoría “Trayectoria Empresarial” a la empresa Alsa, líder en el sector del transporte como una de las empresas más representativas de Asturias y emblema de una destacada saga empresarial.
Estos premios, que serán entregados por la presidenta de FADE, María Calvo, contarán con una estatuilla creada por el artista asturiano Pablo Maojo y estarán enmarcados en la primera Gala de las Empresas Asturianas, con el patrocinio de Total Energies y Banco Santander.
Premio «Empresa de Asturias 2024»
Crivencar-Tierra Astur es el mayor distribuidor de productos asturianos artesanales. La empresa ha logrado consolidarse como referente en el sector agroalimentario y hostelero en Asturias, destacando tanto por su compromiso con la identidad regional como por su audacia en innovación y expansión. Con más de 40 años de experiencia, esta empresa fundada por César Suárez Junco ha revitalizado productos tradicionales y ha marcado el camino en sectores como el comercio online y la internacionalización de los productos asturianos.
Crivencar sostiene 500 puestos de trabajo directo, colabora con 2.000 proveedores asturianos y atiende a unos dos millones de clientes anuales a través de algunas de sus líneas de negocio.
Premio «Trayectoria Empresarial»
Alsa, empresa centenaria fundada oficialmente en 1923 pero con raíces que se remontan al siglo XVIII, ha evolucionado desde el transporte de mercancías en Asturias hasta convertirse en el mayor grupo español de transporte de viajeros por carretera, con presencia en varios continentes. Pionera en la modernización del transporte, fue una de las primeras en España en incorporar vehículos de vapor y gasolina en el siglo XX. Bajo la dirección de José Cosmen en los años 60, Alsa experimentó un crecimiento significativo, abriendo su primera línea internacional (Oviedo-París-Bruselas) y estableciendo rutas clave como Asturias-Madrid.
El proceso de internacionalización de Alsa comenzó en 1984 en China, seguido de Marruecos en 1999, donde gestiona servicios de transporte urbano en varias ciudades. Durante los años 90, Alsa expandió su presencia nacional al integrar empresas regionales y adquirir el Grupo Enatcar en 1999. En 2005, se unió al operador británico National Express Group, consolidando su posición, y en 2007, adquirió el Grupo Continental Auto, fortaleciendo aún más su liderazgo en el transporte de viajeros en España.