Las decisiones de contratación se encuentran entre las más importantes que se pueden tomar en la empresa porque los costes asociados con una mala contratación son astronómicos. Cada vez que una empresa reemplaza a un empleado asalariado, los costes asociados son de seis a nueve meses del sueldo de esa persona.
Pero estos son solo los costes económicos. Una mala contratación también puede tener un efecto devastador en la moral y la productividad de los demás. Seleccionar un mal candidato puede tener un impacto profundamente tóxico en la cultura de tu organización.
Los grandes gerentes de contratación prestan especial atención no solo a lo que dicen los candidatos, sino también a lo que hacen, tanto dentro como fuera de la entrevista. Este proceso, incluidos los pasos que se describen a continuación, puede ayudarte a seleccionar candidatos que tengan una alta inteligencia emocional.
Leer el lenguaje corporal
Una investigación de UCLA ha demostrado que solo el 7% de la comunicación se basa en las palabras que decimos. En cuanto al resto, el 38% proviene del tono de voz y el 55% restante proviene del lenguaje corporal. Aprender a interpretar el lenguaje corporal te da una ventaja cuando contratas.
Muchas señales, como las cejas levantadas o la mandíbula apretada, revelan incomodidad (incluso cuando las palabras dicen lo contrario) o lo que realmente le apasiona al candidato (por ejemplo, el lenguaje corporal reflejado y la duración del contacto visual). Estos indicadores te ayudarán a comprender mejor si tu candidato es adecuado para el puesto. Aprender a reconocer los gestos sutiles de los candidatos puede brindarte una ventaja adicional para evaluar a quién debes contratar.
Detecta evidencia de comportamientos de ecualización alta y baja
Una vez que aprendas a detectar comportamientos indicativos de las cuatro habilidades de inteligencia emocional, darás un gran paso adelante. Son estas:
- Autoconciencia
- Autogestión
- Conciencia social
- Habilidades de gestión de relaciones
Por ejemplo, un candidato que te repite una pregunta para confirmar que la entendió correctamente está demostrando una buena gestión de las relaciones. Si bien ese es solo un pequeño detalle, juntar muchos detalles en el transcurso de una entrevista muestra una imagen clara de a quién debes contratar. Si tienes varios candidatos con el mismo nivel de habilidades técnicas, entonces estas habilidades de inteligencia emocional serán el factor decisivo.
Entrevista fuera de la entrevista
Presta especial atención a cómo se comportan los candidatos antes, durante y después de la entrevista. ¿Cómo tratan a tu personal? ¿Ha sido amable con las personas de recepción? ¿Ha sido condescendiente? Los comportamientos aparentemente pequeños brindan información valiosa sobre cómo un candidato encajará con tus empleados, así como sobre cómo tratará a tus clientes.
Haz preguntas de sondeo
Muchos entrevistadores tienen el mismo abanico de preguntas que usan para todas las entrevistas de candidatos, con algunas preguntas específicas del trabajo. Ya tienes el currículum del candidato frente a ti, y la entrevista es tu oportunidad para profundizar más y superar las habilidades técnicas y los antecedentes. Hacer varias tandas de preguntas de sondeo te ayudará a saber cómo el candidato se adapta a los cambios y desafíos.
La clave para investigar más a fondo durante una entrevista es ir más allá de las respuestas enlatadas de los candidatos a tus preguntas. Cuando un candidato responde a una pregunta proporcionando un ejemplo o una historia, pregúntale cosas como por qué eligió hacerlo de esa manera y cómo lo haría de manera diferente la próxima vez. Sus respuestas te mostrarán lo conscientes que son, cómo influyen en los que les rodean y cómo buscan mejorar con el tiempo.
Comentarios de los empleados
Ten en cuenta que tus empleados actuales van a tener que trabajar con el nuevo empleado todos los días, así que pídeles comentarios. Debes obtener información de todas las personas que tuvieron contacto con el candidato durante el proceso de contratación. Después de todo, estás buscando a alguien que complemente al equipo de manera integral, en lugar de simplemente llenar un vacío de habilidades. Muestra a tus empleados actuales que valoras sus opiniones y su bienestar en el trabajo.
La inteligencia emocional es solo una pieza en el rompecabezas de la contratación, pero cada vez es más importante. Cuando la usas para conseguir la contratación adecuada, minimizas el riesgo de absorber toxicidad, bajo rendimiento y rotación. Además, incorporar personas de alta inteligencia emocional eleva el desempeño de los empleados existentes y ayuda a construir la cultura que deseas para tu empresa.
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