El número de parados descendió en 216.700 personas en el segundo trimestre del año respecto del trimestre anterior, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Tras este descenso, el número total de desempleados se sitúa en 4.574.700 personas, su menor nivel desde el cuarto trimestre de 2009, y la tasa de desempleo baja un punto, hasta el 20%, su cifra más baja desde el tercer trimestre de 2010.
Sin embargo, este recorte del desempleo es inferior a los logrados en los segundos trimestres de 2015 (-295.600 parados) y 2014 (-310.400), pese al menor crecimiento también de la población activa (54.600 personas entre abril y junio).
Por lo que respecta a la creación de empleo, entre abril y junio se crearon 271.400 empleos (+1,5%), por debajo de los más de 402.400 puestos de trabajo generados en el segundo trimestre de 2014 y los 411.800 nuevos empleos registrados en el segundo trimestre de 2015. En el último año, la ocupación ha aumentado en 434.400 personas, a un ritmo anual del 2,4%, frente al 3,4% del trimestre anterior.
Todo el empleo creado en el trimestre se generó en el sector privado, pues el público destruyó 23.200 empleos. En particular,destaca el empuje del sector servicios y también el comportamiento positivo del sector de la construcción. En empleo temporal ha repuntado asimismo en este periodo por motivos estacionales.
El crecimiento del empleo se desacelera en el sector industrial y particularmente en el sector de los servicios, donde la actividad en la hostelería ha registrado un crecimiento con respecto el trimestre anterior del 9,4%, siendo éste registro inferior al experimentado al promedio de los dos últimos años en este mismo periodo (12,1%).
En términos generales el resultado de la EPA del segundo trimestre merece una valoración positiva, si bien tanto el crecimiento de la ocupación como la evolución de la tasa de desempleo quedan algo por debajo de los resultados estimados previamente.
La desaceleración del ritmo de crecimiento de la ocupación y la menor reducción del desempleo previsiblemente se mantendrán en los próximos trimestres. Este hecho podría estar determinado por una moderación de la actividad económica fruto del menor impulso registrado por los factores que han estado condicionando la evolución de la demanda interna (tipos de interés, precio de las materias primas e impulso fiscal).
No obstante, CEPYME considera que el mantenimiento de unas condiciones más estables en los mercados de capitales y la certidumbre que produciría la materialización de un nuevo escenario presupuestario y la conformación del Gobierno, permitirían mantener el crecimiento del empleo en el entorno del 2,5 de media en 2016 y reducir la tasa de paro ligeramente por debajo del 20%.
