La Confederación Española de la Pequeña y Mediana empresa (CEPYME) celebra la resistencia en la creación de empleo que, pese a la desaceleración económica, reflejan los datos de paro registrado y afiliación a la Seguridad Social de octubre. Asimismo, CEPYME aplaude el sólido compromiso empresarial para seguir tirando de la actividad económica, y pide prudencia y respeto hacia la labor tractora de la economía que desempeñan las pymes españolas.
CEPYME considera que introducir más rigideces en el mercado laboral, como las que se apuntan en el pacto España Avanza, lastraría el empleo. En medio de las negociaciones para la formación de Gobierno, desde CEPYME se pide a los diferentes grupos parlamentarios consideración con el desgaste al que se está viendo sometido el tejido empresarial español, afectado por la elevada inflación, los altos costes, la carestía del crédito, la inestabilidad geopolítica y la proliferación normativa.
El aumento de 92.862 cotizantes en términos medios de octubre encubre en términos desestacionalizados el menor registro para ese mes desde 2012, reduciéndose a 5.077 afiliados más. Y se torna especialmente preocupante la deriva del sector agropecuario, que pierde empleo durante 27 meses consecutivos. El ramo sigue fuertemente afectado por los cambios en la PAC, la sequía, los altos costes y el impacto de la subida del salario mínimo interprofesional (SMI).
CEPYME considera que las empresas españolas precisan un entorno de flexibilidad para adaptarse a la demanda y la coyuntura, así como seguridad jurídica que aliente la inversión y propicie la ganancia de tamaño de las pymes, factor clave para reducir su vulnerabilidad ante las crisis.
La ralentización de la economía española respecto a la senda de recuperación iniciada por los países de nuestro entorno puede no ser palpable en el corto plazo, pero sin duda a medio plazo tendrá impacto negativo sobre la ya exigua productividad de nuestras empresas y la competitividad de nuestra economía.
