AMETIC, la Asociación de Empresas de Electrónica, Tecnologías de la Información, Telecomunicaciones y Contenidos Digitales, ha concedido su «Medalla de Oro» a Mateo Valero. La máxima distinción que otorga la patronal tecnológica se viene entregando en los últimos años coincidiendo con la celebración en Barcelona del Mobile World Congress.
Este reconocimiento a Mateo Valero –señaló José Manuel de Riva presidente de AMETIC- viene motivado por «su compromiso con la industria y su convencimiento de que la investigación de calidad se caracteriza por su utilidad, así como por sus valores, su calidad humana y por la enorme aportación global que para nuestro país supone su contribución científica y profesional». De Riva subrayó también la importancia del Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Computación www.bsc.es que dirige el profesor Valero y aprovechó para reiterar el compromiso de AMETIC con el Mobile World Congress, dentro de cuya celebración se enmarca el acto de la entrega de la “Medalla de Oro” de AMETIC.
Mateo Valero Cortés (Alfamén, Zaragoza, 1952) cursó brillantemente su carrera de Ingeniero en Telecomunicación en la Universidad Politécnica de Madrid (1974), doctorándose por la Universidad Politécnica de Cataluña en 1980, donde es profesor de Arquitectura de Computadores. También es director del Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación. Su investigación abarca diferentes conceptos del mundo de la Arquitectura de Computadores, disciplina en la que ha publicado más de 600 artículos entre revistas, ponencias y libros. Valero ha combinado su labor académica con la creación y gestión de centros dedicados a la investigación sobre computación de altas prestaciones y la transferencia de tecnología a las empresas.
En el transcurso de una cena, patrocinada por Cellnex Telecom, que ha tenido como escenario el Teatro del Liceo de Barcelona, y que contó con la presencia de Xavier Gibert, secretari general del departament d’Empresa i Ocupació de la Generalitat, el homenajeado recibió la distinción de manos de Carmen Vela, secretaria de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación, y de Víctor Calvo-Sotelo, secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, que glosaron la excelencia académica e investigadora del profesor Mateo Valero, destacando el privilegio de haber sido el primer investigador Europeo que logra el Premio Seymour Cray. Carmen Vela subrayó el concepto acuñado por el profesor Valero de “Ciencia excelente y relevante: la que resuelve problemas de los ciudadanos”. Por su parte, Victor Calvo Sotelo, que se adhirió al reconocimiento que se había hecho del homenajeado, puso de manifiesto la importancia del MWC en Barcelona como punto focal de las telecomunicaciones a nivel mundial y la importancia de la colaboración de todos para lograr que Barcelona siga manteniendo este liderazgo Mateo Valero que agradeció la distinción que le hacía AMETIC, resaltó el papel que tanto la familia como sus colaboradores han tenido en su trayectoria profesional.
Resaltó que el Supercomputing Center es un producto de la colaboración entre administraciones y entre el sector privado y público. “La excelencia investigadora debe ser el paso previo para la relevancia científica y, a partir de una buena conexión con la sociedad, se debe intentar cerrar el círculo logrando que el impacto económico de la investigación genere nuevos recursos para la misma”, señaló, y aseguró que “con este criterio en mente, el Centro ha crecido hasta tener más de 400 investigadores de múltiples países”. El Centro de Supercomputación goza de la calificación Severo Ochoa, formando parte del ecosistema español de innovación como centro de máxima relevancia.
La “Medalla de Oro” de AMETIC se viene a sumar a los múltiples reconocimientos recibidos a lo largo de su carrera. Mateo Valero, además del ya mencionado galardón Seymour Cray, ha recibido el prestigioso premio Eckert-Mauchly -el mayor galardón a nivel internacional en Arquitectura de Computadores-«por su extraordinario liderazgo en construir un centro de investigación de Arquitectura de Computadores de talla mundial, por las contribuciones fundamentales en las áreas de computación vectorial y multi-hilo, y por ser pionero en nuevos enfoques básicos para el paralelismo a nivel de instrucción». También se le otorgó el premio Goode (2009) «por sus contribuciones fundamentales a las arquitecturas de procesadores vectoriales, out-of-order, de multi-procesamiento y VLIW»; el Distinguished Service Award (2012) de la Association for Computing Machinery (ACM), por «el extraordinario liderazgo de iniciativas en materia investigación y educación en informática de alto rendimiento»; el Premio Nacional de Investigación Julio Rey Pastor en Matemáticas, Tecnologías de la Información y Comunicaciones (2001); el Premio Nacional de Investigación Leonardo Torres Quevedo de Ingeniería (2006); y el Premio Rey Jaime I a la investigación básica (1997), entre otras muchas distinciones.